El gobernador de Florida, Ron DeSantis (R), firmó ayer un proyecto de ley que rescinde formalmente el control privado de The Walt Disney Company sobre un distrito de 39 millas cuadradas en las afueras de Orlando, donde operan sus parques temáticos. La medida finaliza un proceso de un año que busca poner fin al estado especial de 56 años de Disney en el estado.
En 1967, el área fue designada por los legisladores de Florida como el Distrito de Mejoramiento de Reedy Creek. La Ley Reedy Creek le dio a Disney un control casi total sobre los impuestos, los códigos y los servicios, y fue supervisada por una junta de cinco miembros designados por la empresa.
El nuevo proyecto de ley no aboliría el distrito como se propuso en abril, sino que entregaría el poder en el distrito al gobernador, a partir del 1 de junio. Mantener el distrito intacto fue diseñado en parte para evitar ensillar al estado y condados adyacentes de Orange y Osceola con casi $ 1 mil millones en deuda municipal de Disney.
