Un hombre joven en Florida que preguntó si un chaleco antibalas “aún servía” murió del disparo que le hizo su primo, indicó la policía.
Joaquín Méndez, de 23 años, se puso el sábado el chaleco y “preguntó en voz alta si aún servía”, según el informe que presentó la policía de Tampa. El primo de Méndez, Alexandro Garibaldi, de 24 años, sacó una pistola y respondió “vamos a ver”.
Los agentes encontraron a Méndez afuera de la casa con una herida en bala en el pecho. Murió en un hospital.
Según el informe, en un principio Garibaldi les a los agentes que encontró herido a su primo después de que escuchara un disparo. Sin embargo, los testigos señalaron que él le disparó a Méndez, de acuerdo con la policía.
El chaleco fue encontrado en el interior de la casa y presentaba el impacto de un balazo.
Garibaldi estaba detenido el domingo sin derecho a fianza y acusado de homicidio involuntario. Los expedientes de la cárcel del condado Hillsborough no muestran si ya cuenta con un abogado.
