El gobernador de Florida, Rick Scott, suspendió hoy a la alcaldesa de la localidad de Hallandale Beach (sureste de Florida), Joy Cooper, quien este jueves fue detenida acusada de lavado de dinero y otros cargos.
En su escrito, Scott señala que “Cooper tiene prohibido realizar cualquier acto oficial, deber o función de un cargo público; de recibir cualquier pago o asignación; y de tener derecho a cualquiera de los emolumentos o privilegios de un cargo público durante el período de esta suspensión”.
Cooper se entregó voluntariamente el jueves en una cárcel en Fort Lauderdale luego de que una investigación secreta realizada por el Buró Federal de Investigaciones (FBI) llevara a la Fiscalía a presentar cargos contra ella por lavado de dinero, mala conducta pública y excederse en el límite de las contribuciones de financiación de su campaña.
Todos son delitos considerados de tercer grado, aunque Cooper afronta también un cargo de delito menor de primer grado por solicitar contribuciones a una campaña en un edificio gubernamental.
Cada uno de los tres primeros cargos en su contra se castiga con una pena de prisión no superior a los cinco años, mientras que el cargo por delito menor conlleva una pena de hasta un año de cárcel.
La alcaldesa, en el cargo desde 2005, señaló ese mismo jueves mediante una declaración escrita, y tras abandonar la cárcel, según el medio Local10, que “peleará vigorosamente estas acusaciones en la corte”.
