El caso de Anthony Weiner está estremeciendo la campaña electoral estadounidense ya que mensajes en su computadora han sido citados por el FBI como la razón por la cual está investigando de nuevo las prácticas cibernéticas de la candidata demócrata Hillary Clinton.
Wiener está casado con Huma Abedin, una estrecha colaboradora de Clinton. Sin embargo, están ahora separados debido a sus repetidos escándalos en que ha sido descubierto intercambiando sensuales mensajes de texto con chicas.
La investigación federal sobre los mensajes de Weiner es el “caso no relacionado” mencionado por el FBI que le llevó a investigar de nuevo la práctica de Clinton de usar un sistema privado de correo electrónico cuando era secretaria de estado.
El director del FBI James Comey dijo el viernes al Congreso que los mensajes “podrían ser pertinentes a nuestra investigación” sobre el sistema privado de Clinton.
Ello nuevamente puso en la luz pública a Weiner, otrora figura ascendente en el Partido Demócrata y que ahora es el blanco del oprobio público.
Weiner tuvo que renunciar a su escaño en el Congreso en el 2011, cuando colocó por error en Twitter una imagen de sí mismo en ropa interior. El mensaje iba dirigido a una mujer que no era su esposa.
Abedin siguió casada con él, quien dos años después se postuló para alcalde de Nueva York. Estuvo incluso por un tiempo de primero en las encuestas, hasta que surgió evidencia de que seguía enviando mensajes lascivos por texto.
Cuando fue descubierto de nuevo en esa práctica el año pasado, Abedin lo dejó. Las autoridades federales comenzaron a investigar la posibilidad de que estaba enviando mensajes pornográficos a una chica de 15 años de edad.
El ex congresista no respondió a repetidas solicitudes el sábado para que haga comentarios, en momentos en que su escándalo se contagiaba por la carrera presidencial.
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Por JENNIFER PELTZ y JONATHAN LEMIRE
