Reducir el tamaño de la Cámara de diputados sin considerar una fórmula mixta de integración, podría desaparecer la posibilidad de que el Congreso sea un mayor contrapeso al Poder Ejecutivo.
En consecuencia, la reducción del número de legisladores es deseable, sí y sólo sí, el diseño institucional prevé la inclusión de fórmulas electorales que permitan el acceso de las minorías a la representación y refleje pluralidad, lo cual es posible con la figura de plurinominales.
Una de las demandas públicas para plantear reducir el número de diputados es acortar el gasto que representa el Congreso. Sin embargo, es indispensable estar ciertos de que la reducción de legisladores no es la única respuesta –ni por asomo- para utilizar mejor los recursos.
Aunque nuestro presidente advirtió que ningún legislador del PRM podrá hacer una propuesta diferente a su proyecto de reforma constitucional, eso no significa que deben ser lo que siempre han sido, “levanta manos”; deben parir ideas de consenso, pues esto no es una dictadura de ideas, Abinader escucha y si puede mejorar, mejora.
Yo creo, merecemos considerar el tinglado completo del funcionamiento y obligaciones del Congreso.
Por ejemplo: reducir el número de comisiones ordinarias para ser un reflejo de la organización de las instituciones del Estado y que los recursos utilizados por el Legislativo y asignados al Estado, arrojen beneficios públicos comprobables, accesibles, transparentes, fiscalizables, abiertos y observables por veeduría de una participación ciudadana apolítica.
El actual reparto de diputados de representación proporcional no desaparece las distorsiones que genera el sistema de mayoría relativa, al traducir el porcentaje de votos en curules. Esto sucede porque la asignación de plurinominales se realiza a partir del porcentaje de votación efectiva de cada partido sobre los 190 diputados a repartir en base a número de representados, podría ser opción.
Ahora bien, la reducción de pluralidad se observaría porque con menos posiciones disponibles para los partidos, éstas muy probablemente serían ocupadas por el candidato medio (el que representa el promedio ideológico de su partido), dejando fuera a aquellos aspirantes del mismo partido que están en los extremos ideológicos, haciendo ruido, o incluso a candidatos externos que llevarían distintas voces de la sociedad al Congreso.
En cualquier integración de la Cámara donde el número de diputados de mayoría relativa represente dos tercios o más del tamaño total de la misma, se perdería la actual garantía de modificar la Constitución en el futuro, o leyes que orgánicamente deban consensuarse con alta mayoría, puedan pasar.
Factores que pueblo ve bien en reducir Diputados.
Mire cada uno le cuestan a la nación, entre sueldos, barrilitos, exoneraciones, sesiones, dietas, cafeterías, comidas, fiestas, etc. etc. unos RD$30 millones que por 190 miembros es casi el 90% del presupuesto de esa cámara anual, sin contar jubilaciones.
Se debe:
1 Eliminar la carga que implica a los contribuyentes el sostenimiento de un
pesado aparato burocrático en el Congreso;
2 Facilitar los mecanismos de negociación y concreción de acuerdos legislativos;
3 Dar mayor peso a la representación popular que ejerció el acto democrático del
voto por un candidato de su comunidad;
4 Que los partidos políticos sean más selectivos en sus listas de candidatos y
5 Elevar el nivel de debate y alcanzar un mayor número de acuerdos rápidos, no pasarse 40 meses para evacuar ley
