Solo hay que hacer algunas visitas a las escuelas y estudiar los informes locales de deserción escolar para darnos cuenta que hay segregación escolar por clase económica. Gracias al Huracán María salió a flote el descalabro administrativo gubernamental en las agencias y el gasto innecesario millonario en la administración del departamento de educación publica.
Existe segregación porque si vienes de una familia adinerada puedes ir a la mejor escuela privada con buenos maestros que no se mueven mucho de la escuela a otras escuelas. En la publica, existe un movimiento continuo de maestros que no permiten que el niño se sienta importante. También si estas viviendo en un área metropolitana de la ciudad de San Juan, Guaynabo, Caguas o Bayamón, puedes escoger una mejor escuela publica con recursos, con mejores condiciones físicas y maestros que verdaderamente enseñan.
Los estudiantes pobres que viven en áreas rurales se le hace difícil la transportación. También es muy difícil reclutar maestros que desean estar expuestos a los estudiantes con problemas de disciplina y bajo promedio académico. Usualmente hay una correlación directa entre el comportamiento y las notas. Eso también fue la causante de que las clases en línea no funcionaran durante el shotdown de la pandemia.
Según una maestra de escuela publica elemental la ciudad de Camus entrevistada en el día de hoy, menciona que el tiempo de su clase y de otras maestras de la escuela se iba en regañar a los estudiantes para que prendieran su cámara mientras tomaban las clases. Otros estudiantes interrumpían la clase para hacer preguntas no relacionadas a la clase y comentarios fuera de lugar. Tampoco apagaban el micrófono y dejaban los ruidos de su casa sonaran como parte de la clase. Otros estudiantes simplemente prendían su computadora, apagaban la cámara y se acostaban a dormir.
Por este testimonio nos damos cuenta que lo que no funciona es el sistema publico actual de educación y sus métodos antiguos que ya no funcionan ni motivan al estudiante. Encima de eso, tenemos estudiantes con problemas de comportamiento y bajo promedio que no están motivados para aprender nada.
Este tipo de método de enseñanza en el departamento de educación publica refleja lo que todavía existe y se gasta 4 billones de dólares para perder el tiempo. ¿Realmente podemos culpar a los maestros con 25 estudiantes conectados por computadora con un internet raquítico, con una madre tratando de mantener la señal y la electricidad suficiente para poder ayudar a sus hijos?
Todavía hoy día hay otros estudiantes que no están asistiendo presencialmente por razones medicas y la maestra se supone que tenga una cámara y computadora para que el estudiante tome la clase. Eso tampoco esta pasando en todas las escuelas publicas.
La educación en línea esta creciendo alrededor del mundo. Universidades como Harvard, Indiana, Michigan y MIT estánofreciendo cursos y certificaciones en línea de calidad, la únicadiferencia es que los que la corren el sistema virtual saben hacerlo y se preocupan porque el estudiante tenga un internet robusto, las maestras saben como dar clases virtuales con métodos modernos y los padres están pendientes de que sus hijos estén tomando clases.
El subirle el sueldo al maestro de la escuela publica de Puerto Rico es un buen comienzo pero no asegura que la enseñanza sea de calidad hasta que no cierren el Departamento de Educación de Puerto Rico y lo conviertan en un nuevo centro de enseñanza libre de política, batatas y gastos administrativos innecesarios. Ahora los administradores de la administración central y regiones están pidiendo el aumento de $1,000 dólares también. Se sigue gastando en algo que no aporta al aprovechamiento escolar del niño.
¿Verdaderamente hace falta gastar esos millones en administración y contratos externos cuando se puede automatizar todos los procesos? Si los niños se siguen colgando por décadas en las materias básica entonces no sirve el sistema actual. Si el Departamento de Educación publica fuera un hospital los niños estarían todos muertos. Cierren ese sitio!!!!
