Una soleada mañana de sábado en cualquier campo de Golf americano, una conversación como esta sería más ficticia, que un pasaje de cualquier libro del “poeta de la ciencia ficción”, Ray Bradbury.
_Estoy pensando en comprarme un nuevo auto John… ¿Qué me recomiendas?
_Mi BMW 7 me ha salido muy bueno Mark…pero yo te sugeriría un Genesis o un Equus de Hyundai.
Hyundai sabe que, en los estacionamientos de grandes mansiones en barrios adinerados, uno de sus autos podría ser sinónimo de poca distinción, por muy bueno que este fuera. Este es un fabricante dinámico, que reacciona a los vaivenes del mercado con rapidez, y en el 2017, se ha “separado” del Genesis, que debuta con brío propio, sin dejar huellas visibles de su progenitor. Muchos periodistas invitados a su lanzamiento en Vancouver Canadá, omitieron mencionar la palabra Hyundai. En la página del fabricante ya no se encuentra mención alguna al Genesis, que ya tiene su propio sitio separado en la web.
¿Será todo esto suficiente para que, la asociación mental, Hyundai-Genesis desaparezca? Nadie se atreve a dar una respuesta concluyente. La memoria del consumidor es corta, y el Genesis, aunque se adentra en terrenos peligrosos por la tremenda competencia, tiene a su favor varias cosas. Calidad de fabricación, enigma de su apariencia y precio competitivo. Por otra parte, los concesionarios donde se venderán y les darán servicio a estos autos, serán lo mismo de Hyundai, no la mejor de las opciones, pero por el momento, la única.
Lo del “enigma” de este auto, me quedó muy claro durante la semana de prueba. En varias ocasiones, encontré mientras esperaba por un cambio de luz, a más de un conductor escudriñando al Genesis 90 en detalle, visiblemente impresionados por las dimensiones y el brío del auto, he intrigados por su nombre.
El G80 estará basado en el Genesis, y el G90 que nosotros probamos en el Equus. El G90 será el sedán insignia de la nueva marca, y llega a los concesionarios con precio base de $68,100 dólares en la configuración 3.3T Premium. Hay muy poca diferencia en el precio de los modelos restantes, el 3.3 Premium AWD, 5.0 Ultimate y el 5.0 Ultimate AWD con precio de $72,200. Las diferencias en las denominaciones están estrictamente ligadas a los motores. El 3.3 viene con motor V6 de doble turbo con 365 caballos. Los motores V8, son de 5.0 litros y 420 caballos. El consumo de ambos motores no es de los mejores, pero de seguro, los compradores de este tipo de auto poco les concierne una o dos millas más o menos por galón de gas.
El Genesis G90, por supuesto, incluye una cantidad impresionante de equipamiento de lujo. El asiento del conductor posee 22 ajustes diferentes, y raramente, en el auto que probamos sin masaje. El sistema de información y entretenimiento es ágil y en su mayoría bien diseñado, en una pantalla de 12.3 pulgadas. Hay posibilidades de regular el clima en 3 zonas, varios sistemas de ayuda a la conducción y un excelente audio 7.1 Lexicon de 17 altavoces, que puede también ser controlado desde el asiento trasero.
Hyundai…perdón, Genesis, está tratando de hacer la diferencia en un segmento donde los precios son prohibitivos para los simples mortales de este mundo. En comparación con el G90, un Mercedes S-Class con motor V8 comienza por encima de los $95,000 dólares. Lo más cercano en la gama sería un Lexus LS, por algo más de $72,000, pero tendríamos que compararlo con el Genesis G80 que comienza en los $41,400.
¿A quien les va a robar clientes el Genesis? Indisputablemente a Cadillac, Lincoln y al primo hermano Kia K900. Algún que otro dueño de un envejecido Mercedes o BMW seguro lo considerará, sin olvidar que el segmento se ha complicado aún más, con el resurgir de Jaguar y la sólida tradición lograda en poco tiempo por Lexus.
Genesis necesita también sangre nueva. Necesita quizás de usted, joven empresario o empresaria hispano, que el éxito le ha permitido cierta exuberancia, tentado con el lujo sobre ruedas, y cauteloso de la equivalencia, costo-valor.
Roger Rivero es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana, para fines de la reseña. De ninguna manera los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.