El huracán María, de categoría 3, se alejó hoy de República Dominicana tras castigar la costa noreste del país con vientos huracanados, intensas lluvias y fuerte oleaje que han provocado inundaciones en varios puntos del país.
El ojo del huracán, que se aproximó esta madrugada al país a unos 100 kilómetros al noreste de la turística localidad de Punta Cana, se ubicó a unos 185 kilómetros al noreste de Puerto Plata a las 17.00 GMT tras recorrer en paralelo la costa norte.
Este ciclón, que ha dejado al menos un desaparecido en República Dominicana, se mueve a 15 kilómetros por hora en dirección noroeste, lo que le aleja paulatinamente de la isla La Española y lo encamina hacia el archipiélago de Turcas y Caicos y posteriormente al este de Bahamas, informó hoy el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
A su paso por la costa noreste del país, las fuertes lluvias y el viento, con ráfagas que han superado los 110 kilómetros por hora, han ocasionado la voladura de techos de viviendas, el derribo de árboles y postes del tendido eléctrico, que han dejado sin electricidad sólo en el norte a más de 300.000 dominicanos.
María ha provocado el desplazamiento de más de 14.000 personas, ha afectado 1.286 viviendas y 1 puente, mientras que mantiene 15 localidades incomunicadas, de acuerdo con el Centro de Operaciones de Emergencias (COE), que mantiene 23 provincias en alerta roja (máxima), 4 en amarilla (intermedia) y 5 en verde (mínima).
Hasta ahora, las lluvias más intensas se han registrado en Punta Cana y otros puntos del este, así como en Samaná, y Santiago, la segunda ciudad del país.
En la localidad de Higuey, en la provincia de La Altagracia, el desbordamiento de un río ha inundado varias calles en el barrio de La Florida, según pudo constatar Efe.
La previsión de abundantes lluvias que se esperan en las próximas horas en todo el territorio nacional preocupa a las autoridades, debido a la saturación de los suelos tras las precipitaciones causadas por el huracán Irma, que afectó el país hace solo dos semanas sin ocasionar graves daños, y una vaguada posterior, por lo que han insistido en pedir precaución a la población.
Se calcula que el ciclón pueda generar acumulados de lluvias entre 150 y 330 milímetros, siendo superiores en puntos aislados, que podrían alcanzar hasta 500 milímetros, especialmente en el este, noreste, norte y noroeste.
También habrá una “peligrosa” marea ciclónica que, junto a “grandes y destructivas” olas, elevará el nivel del mar hasta 1,2 a 1,8 metros en la zona de alerta de huracanes en el país, desde el Cabo Engaño (próximo a Punta Cana) a Puerto Plata, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en sus siglas en inglés).
El paso del huracán afectó además al tráfico aéreo ya que varios aeropuertos internacionales suspendieron por algunas horas sus operaciones y más de 70 vuelos fueron cancelados desde y hacia los dos aeropuertos internacionales de la capital.
Unos 4.000 turistas que se encontraban alojados en Bávaro y Samaná fueron trasladados a otros hoteles de Punta Cana y de la capital dominicana, como medida preventiva del sector turístico, principal fuente de ingresos del país.
Mientras que en las principales ciudades del país la actividad hoy quedó paralizada ya que el gobierno suspendió la actividad laboral, tanto pública como privada, así como las clases en los colegios, y la mayoría de comercios también cerró sus puertas.
Pese a que el huracán María se aleja de las costa norte del país, la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet) aún mantiene el aviso de condiciones de huracán desde Cabo Engaño, próximo a Punta Cana, hasta Puerto Plata y un aviso de condiciones de tormenta tropical desde Puerto Plata hasta la Bahía de Manzanillo así como desde Boca Chica hasta Cabo Engaño.