Periodistas del Club Nacional de Prensa reclamaron hoy en Washington una mayor conciencia social sobre su trabajo ante el incremento de los ataques a la prensa a nivel global y advirtieron de que se trata de una “emergencia pública”.
“No es un problema de la prensa, se trata de una emergencia pública”, advirtió Kathy Kiely, del Instituto de Libertad de Prensa de la entidad durante una conferencia en Washington con motivo del Día Mundial de la Libertad de Prensa.
Kiely incidió en la necesidad de concienciar al resto de ciudadanos sobre la importancia de su labor ante un contexto en el que se multiplican los ataques emprendidos contra los periodistas desde el poder político, personalizados en el propio presidente, Donald Trump, entre otros líderes.
La periodista incidió en que para la democracia occidental y EEUU es “vital” que se mantenga la “vigilancia al poder, y esa vigilancia la ejercen los periodistas”: “Para salvar al periodismo hay que salvar a los periodistas”.
Durante la conferencia, en la que se destacaron múltiples casos de periodistas que han sido asesinados o detenidos mientras ejercían su profesión, los expertos de la organización enfatizaron en que cuando se atenta contra la libertad de un periodista se busca “enviar un mensaje de cuáles son las líneas rojas”.
En este sentido, la presidenta del Club Nacional de Prensa, la periodista de Bloomberg Andrea Edney, destacó la relevancia de “seguir escribiendo y seguir informando” sobre los casos en los que los gobiernos autoritarios tratan de coartar el derecho a la información de los ciudadanos.
“Pensad en la gente que trabaja por vosotros, en la gente que muere y que está en prisión”, reclamó Edney a la sociedad, recordando a los periodistas que buscan informar a la población y que, como consecuencia de ello, terminan sufriendo alguna de estas situaciones.
Para Edney, la deriva observada en los últimos años en este aspecto implica que la situación actual suponga un momento “crítico”.
Misma línea mantuvo John Donnelly, jefe del Comité de Libertad de Prensa de la organización, quien subrayó la necesidad de que “los malos no se salgan con la suya”.
“Necesitamos hacer un mayor trabajo para que la gente se dé cuenta de que somos representantes del público”, aseveró Donnelly en un llamado a sus compañeros de gremio para poner en valor su labor diaria.
El periodista consideró que hasta ahora la pedagogía no ha sido suficiente: “Aparentemente la gente no lo ha entendido porque el presidente (Donald Trump) sigue adelante”, comentó.
Insistió en esto Yeganeh Rezaian, periodista que fue detenida en 2014 en Irán junto con su marido, el reportero de “The Washington Post” Jason Rezaian, que fue el último en salir de prisión en un proceso de intercambio de prisioneros entre Teherán y Washington en 2016.
Durante la rueda de prensa, también informaron de que la Universidad de Michigan ha concedido una beca al periodista mexicano Emilio Gutiérrez, huido a EEUU debido a las amenazas recibidas en su país y que se encuentra en prisión mientras se decide sobre su proceso de deportación después de que se le haya negado el asilo.