La ONU afirmó hoy estar “seriamente preocupada” por la situación en deterioro que viven unos 25.000 civiles en la ciudad siria de Al Raqa, que se encuentran atrapados en una batalla entre las fuerzas gubernamentales y el grupo terrorista estado Islámico (EI) por el control de la zona.
“Estoy profundamente perturbado por los informes que salen de Al Raqa sobre la horrible situación a la que se enfrentan los civiles atrapados en la ofensiva para retomar la ciudad del EI”, apuntó en un comunicado el asesor especial de la ONU para la Prevención del Genocidio, Adama Dieng.
“La ciudad está bajo un intenso bombardeo por parte de la coalición internacional que lucha contra el EI. Además, el EI supuestamente está usando a los civiles como escudos humanos”, agregó.
Unos 25.000 civiles permanecen atrapados en zonas de Al Raqa que aun están bajo el control del grupo islamista, que, según denuncia la ONU, está matando a todos aquellos que están tratando escapar de la zona.
Además, apunta la organización, la coalición que lucha contra el EI está atacando los barcos que navegan por el río Eúfrates, situado al sur de la ciudad, que estaba siendo utilizada como una de las únicas vías de escape por los civiles.
Asimismo, también se enfrentan a ataques indiscriminados por parte de las fuerzas del Gobierno de Siria y sus aliados al sur del río en las operaciones de retoma de la ciudad.
“Urjo a todas las partes a que de adhieran a sus obligaciones bajo los derechos humanos internacionales y la ley humanitaria internacional”, afirmó Dieng, que subrayó que deben adoptar todas las medidas posibles para proteger a los civiles y a las infraestructuras.
“El objetivo legítimo de retomar el control de Raqqa no debe conseguirse con un coste civil tan elevado”, aseveró.