El alero estrella LeBron James surgió una vez más con su mejor inspiración encestadora y aportó 44 puntos que ayudaron a los Cavaliers de Cleveland a ganar por 111-102 ante los Celtics de Boston en el cuarto partido de la serie de las finales de la Conferencia Este.
La victoria permite a los Cavaliers empatar a 2-2 la serie que disputan al mejor de siete y el quinto partido se jugará el próximo miércoles en el TD Garden de Boston.
James, que anotó 17 de 28 tiros de campo, incluido un triple de cuatro intentos, y 9 de 13 desde la línea de personal, superó al legendario Kareem Abdul-Jabbar, en la lista de los máximos anotadores en la competición de la fase final en la historia de la NBA.
La estrella de los Cavaliers, que estuvo perfecto en el primer cuarto, llegó a los seis partidos en los playoffs en los que ha conseguido al menos 40 puntos, lo que demuestra que sin su inspiración estarían ya eliminados de la competición, y se convierte en el primer jugador que lo consigue desde que lo hizo en el 2001 el exbase Allen Iverson con los Sixers de Filadelfia.
Ahora el gran reto para los Cavaliers es tratar de conseguir un triunfo en Boston y para ello, James admitió que estaba preparado a enfrentarse a un ambiente hostil, el mismo que los aficionados de su equipo le brindaron a los Celtics en el Quicken Loans Arena de Cleveland.
James, que alabó el trabajo de todo el equipo, destacó que la clave el partido estuvo de nuevo en tener la capacidad defensiva de no permitir que el pívot titular de los Celtics, el dominicano Al Horford, pudiese tener protagonismo en el juego ofensivo.
“La labor defensivo que en los dos últimos partidos hicimos en el marcaje a Horford ha sido una de las claves que nos ha permitido conseguir los triunfos y empatar la serie”, destacó James. “Ahora estoy listo para el reto de Boston aunque sé con el ambiente hostil y difícil que nos vamos a encontrar, pero intentaremos aprovechar nuestras posibilidades de cara a conseguir la victoria”.
Junto a James, otros tres jugadores de los Cavaliers anotaron números de dos dígitos, incluido el escolta Kyle Korver, que como reserva llegó a los 14 tantos y puso tres tapones decisivos.
Mientras que el pívot Tristan Thompson surgió como el factor sorpresa ganador que dominó en el juego interior al conseguir un doble-doble de 13 puntos y 12 rebotes, incluidos 10 defensivos, y también puso dos tapones que ayudaron en el juego defensivo de los Cavaliers.
El base George Hill llegó también a los 13 tantos y el ala-pívot Kevin Love logró nueve tantos después de anotar sólo tres canastas de 12 tiros de campo, pero capturó 11 rebotes, repartió tres asistencias y perdió seis balones.
El base español José Manuel Calderón esta vez no recibió ningún minuto por parte del entrenador de los Cavaliers, Tyronn Lue, y siguió el partido desde el banquillo.
Los Cavaliers intentan convertirse en el vigésimo equipo de 300 que consiguen superar una desventaja de 0-2 al comienzo de una serie de siete partidos en la competición de los playoffs, donde ellos ya lo han logrado dos veces y buscarán una tercera.
Aunque los Celtics jugaron un buen baloncesto de equipo con los cinco titulares que lograron números de dos dígitos, incluido el escolta Jaylen Brown, que aportó 25 puntos, seis rebotes y dos asistencias, al final no pudieron con el factor James, que fue el que hizo la diferencia.
De hecho, perdieron apenas nueve balones por 18 de los Cavaliers, incluidos siete de James, pero la inspiración encestador de James fue demoledora.
El alero novato Jayson Tatum llegó a los 17 puntos como segundo máximo encestador, mientras que el base Terry Rozier logró un doble-doble de 16 tantos, 11 asistencias, seis rebotes y recuperó tres balones.
Horford jugó 42 minutos en los que aportó 15 puntos tras anotar 5 de 13 tiros de campo, incluido un triple de tres intentos, y estuvo perfecto 4-4 desde la línea de personal.
Además de capturar siete rebotes –todos defensivos–, dio una asistencia, recuperó un balón, puso un tapón y cometió una falta personal.
Mientras que el ala-pívot Marcus Morris llegó a los 10 tantos, sin que tampoco pudiese contener en el juego defensivo al vendaval encestador de James.
A pesar de la derrota, el entrenador de los Celtics, Brad Stevens, recordó que la única preocupación que ahora debe tener su equipo es la de conseguir la victoria en el quinto partido de la serie que van a disputar en su campo.
“Ellos hicieron lo mismo que nosotros en nuestro campo, donde jugaremos el próximo partido y estoy convencido que seremos un equipo diferente”, destacó Stevens.
“No tuvimos la mejor inspiración encestadora, pero como equipo fuimos superiores a los Cavaliers, que una vez más tuvieron al mejor jugador del mundo de su lado”, comentó.
Los Celtics tienen marca perfecta de 9-0 en lo que va de playoffs en su campo del TD Garden.
Marisol Vázquez
