Alianza por la Solidaridad-Action Aid ha intensificado su actividad en Haití y ha hecho un llamamiento de ayuda humanitaria urgente ante nuevas réplicas sísmicas y la llegada de más huracanes.
La organización recuerda que la situación humanitaria en Haití para al menos 650.000 personas empeora a medida que pasan los días debido a las complicaciones para la distribución de la ayuda humanitaria internacional, nuevas réplicas sísmicas en las cercanías del terremoto del pasado 14 de agosto y la previsión de llegada de tormentas tropicales y huracanes.
Coincidiendo con el Día Internacional de la Solidaridad, que se celebra este 31 de agosto, Alianza por la Solidaridad-Action Aid se hace eco del llamamiento de Naciones Unidas para conseguir unos 160 millones de euros en ayuda de emergencia para miles de familias que se han quedado sin hogar, medios de subsistencia ni acceso a unas mínima condiciones de vida.
Florentine David, coordinadora de proyectos de la ONG en el país caribeño, ha explicado las dificultades con las que se encuentran. “La gente está tan desesperada que ha habido asaltos a camiones que llevaban alimentos a zonas afectadas y ahora tienen que ir escoltados por agentes de la policía nacional; también se intenta enviar con un barco de una organización francesa, dado que el aeropuerto en la región es pequeño. Afortunadamente, Alianza ya tenía recursos en la zona, que no fueron afectados por el terremoto, y la distribución ha sido rápida, aunque se necesitará mucho más”, ha indicado.
A las nuevas réplicas sísmicas que se están produciendo –varias de 3,5º de magnitud en los últimos días– se suma que, desde Protección Civil del país se ha informado de que este año están por llegar unas 21 tormentas tropicales y huracanes entre junio y noviembre, eventos climáticos que se encontrarán con más de 77.000 casas semidestruidas, 53.000 totalmente destruidas, carreteras impracticables y centros de salud y escuelas desaparecidas. Sólo en el departamento de Grand’Anse cinco centros de salud (Corail, Carrefour Charles, Duchity, Latiboliere y Pestel) son hoy escombros.
La ayuda que la ONG española reparte en la zona más afectada por el seísmo consiste en alimentos y artículos esenciales no alimentarios como cobijo, utensilios de cocina, kits para el tratamiento del agua y kits de higiene para mujeres y niñas, un sector con el que también se trabaja en la prevención de la violencia.
Respecto a alojamientos alternativos para quienes se han quedado sin casa tras esta catástrofe, el Gobierno haitiano ha pedido a las organizaciones internacionales que no levanten campamentos para damnificados, sino que las familias afectadas instalen las carpas o tiendas de campaña en sus propiedades. Tratan de impedir así que este tipo de asentamientos se conviertan en permanentes durante años, como hace una década.
Hasta el momento, más de 5.000 familias ya han recibido apoyo de Alianza, cifra que aumentará previsiblemente en 3.780 en las dos o tres próximas semanas con la llegada de más ayuda internacional.
A fecha de hoy, ya son 2.207 las víctimas mortales del seísmo del 14 de agosto, que alcanzó una magnitud de 7,4º. Aún hay 320 desaparecidos, según datos de Naciones Unidas.