La vicepresidenta de la República, doctora Margarita Cedeño, encabezó la conferencia realizada en el Salón Verde del Palacio Nacional, con el fin de ofrecer pautas para el abordaje integral del embarazo en adolescentes.
SANTO DOMINGO.- El embarazo adolescente y la maternidad temprana son algunas de las principales preocupaciones sociales, debido a sus consecuencias e implicaciones económicas y de salud.
Por esta razón, y con motivo a la celebración del Día Mundial de Prevención del Embarazo No Planificado en Adolescentes, la Vicepresidencia de la República presentó la conferencia Buenas Prácticas en Prevención de Embarazo en Adolescentes en América Latina, impartida por Carolina González Acero, especialista de la División de Protección Social y Salud del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
La vicepresidenta de la República, doctora Margarita Cedeño, encabezó la conferencia realizada en el Salón Verde del Palacio Nacional, con el fin de ofrecer pautas para el abordaje integral del embarazo en adolescentes, y prevenir así el flagelo que afecta al 20.6 por ciento de jóvenes entre 15 y 19, según la última Encuesta Demográfica y Salud realizada en el país.
Previo a la exposición de la conferencista, la directora general del programa Progresando con Solidaridad (Prosoli), doctora Altagracia Suriel, aseguró que a través de los proyectos Yo Decido Esperar y Bebé Piénsalo Bien desarrollados por la iniciativa social, unos 480 mil 882 adolescentes y jóvenes que viven en pobreza e indigencia han recibido orientaciones tendentes a reducir el embarazo a temprana edad.
Sostuvo que según el boletín Desafíos, publicación de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), los factores que influyen en el embarazo en adolescentes son los cambios socioeconómicos, los nuevos estilos de vida y una insuficiente educación sexual.
“En el ámbito de esa población joven tienen también mucho impacto la presión de grupo, la curiosidad, el abuso sexual, el sexo como paga por dinero, y sobre todo la falta de orientación de los padres y madres. El embarazo en adolescentes, como dice la vicepresidenta Margarita Cedeño, es una máquina de reproducción de miseria y dependencia. Por eso es necesario que redoblemos los esfuerzos para librar a las adolescentes de este gran riesgo social”, expresó Suriel.
La conferencia forma parte del Congreso Nacional de Prevención de Embarazo en Adolescentes Yo Decido Esperar, organizado por Prosoli, que se celebrará mañana en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), de 8:00 de la mañana a 5:00 de la tarde.
La conferencia
En la conferencia González Acero presentó las buenas prácticas que se desarrollan en América Latina para prevenir el embarazo en adolescentes, para que puedan servir como referencia de innovación y mejorar las iniciativas que se realizan en el país.
Dijo que la problemática es un tema grave porque América Latina y el Caribe tienen la tasa más alta de adolescentes mujeres y que reportan haber tenido relaciones sexuales antes de los 15 años, es decir, un 22 por ciento.
“Lamentablemente a nivel regional hay una tolerancia en cuanto a la nupcialidad de las mujeres a edades tempranas, es decir que las mujeres se casen a los 14 o 15 años en muchos países no es visto de mala forma. También tenemos tolerancia a que las adolescentes se vayan a vivir o tengan relaciones con hombres muchísimos mayores que ellas”, sostuvo.
Reveló que la mitad de los menores de 17 años ya tienen una vida sexual activa; sólo uno de cada 10 varones usa métodos anticonceptivos en cada relación sexual, y que el 15 por ciento entre 15 y 19 años se ha contagiado de alguna enfermedad de transmisión sexual.
“Tenemos una falta de protección frente al abuso sexual, en muchos casos las adolescentes no se sienten respaldadas para denunciar un abuso, tienen miedo, no saben dónde ni cómo hacerlo”, expresó.
Decidir esperar
Cientos de adolescentes y jóvenes del Gran Santo Domingo participaron en la conferencia que tuvo como objetivo facilitar espacios de reflexión para que la juventud pueda tomar conciencia sobre las causas y consecuencias del embarazo en adolescentes, y puedan aprender a involucrarse de forma protagónica en las acciones de prevención.
En representación de los jóvenes asistentes, María Elena Nivar, quien se mostró preocupada por la idea de muchos adolescentes de vivir una vida sin responsabilidad.
“Me preocupa que en estos tiempos se nos vende la idea de que podemos vivir en “libertad”, una libertad que invita a vivir sin responsabilidad, que dice que todo está bien, que podemos hacer lo que queremos sin compromisos, sin medir consecuencia, sin ataduras, vivir sólo en el placer y el sexo es parte de esa nueva libertad. Nos dicen que tenemos derecho a tener relaciones sexuales siendo adolescentes y después se sorprenden cuando quedamos embarazas o contagiadas con las infecciones de trasmisión sexual”, manifestó.
La Vicepresidencia también busca que los participantes puedan reflexionar sobre la realidad, causas, consecuencias del embarazo en adolescentes, que conozcan las políticas y programas que se implementan para la prevención del embarazo en edades tempranas.
También se persigue facilitar que los jóvenes conozcan buenas prácticas para la prevención de embarazos en adolescentes en República Dominicana, propiciar que los participantes construyan planes de acción donde ellos puedan generar actividades que contribuyan a prevenir el embarazo en adolescentes.
La vicepresidenta Margarita Cedeño encabeza reuniones de trabajo periódicas con los representantes del Despacho de la Primera Dama y los ministerios de la Mujer, Salud Pública, Educación, Juventud, de Economía Planificación y Desarrollo, a los fines de articular políticas para la creación y el fortalecimiento de mecanismos dirigidos a reducir el embarazo precoz.
Perfil
Carolina González Acero es especialista en salud. Sus cargos anteriores incluyen el trabajo en el Departamento Nacional de Planeación de Colombia, el Banco Mundial y el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial de Colombia. Su trabajo se enfoca en temas de salud materna e infantil y nutrición en varios países de América Latina y el Caribe.
Posee una maestría de la Universidad de Johns Hopkins en Economía Aplicada, y realizó una Especialización en Economía en La Universidad de los Andes. Colombiana profesional en Finanzas y Relaciones Internacionales de la Universidad Externado de Colombia.
