Se pueden ver y sentir algunas reacciones e incluso complicaciones en la esfera neurológicas con la administración de las vacunas. No todas dan los mismo síntomas y signos pero casi todas nos protegen y previenen de mucha enfermedades y agentes patógenos, sobre todo de virus y la COVID-19 que es una enfermedad nueva con tres cepas virales se CoVSARS-2 hasta ahora y varias mutaciones activas y que entraron en forma pandémica en varios continentes y nos tienen acorralados, confinados, aislados, distanciados y a la espera de su evolución final.
Este año 2021 se hablará, documentará, Investigará mucho sobre este tema de vacunas y en lo particular hare un resumen de lecturas de portales médicos sobre posibles complicaciones neurológicas ya reportada con otros virus y algunas con el actual Cov-SARS-2, siempre con la intención de informas y educar, no para asustar o ir en contra de la vacunación a diferentes grupos y de acuerdo con protocolo bien establecidos y prioritarios. Hay un estado de emergencia en algunos países donde ya se empezó la vacunación, aun sin cumplir todos los detalles, protocolos y estudios que habitualmente se hacen con una vacuna, pero la Organización Mundial de la Salud lo autorizó por la emergencia actual. Hay que ir poco a poco y con controles en cada paso. Esperemos pocas reacciones o complicaciones importantes generales y neurológicas.
Desde 1989 se presentaron neuropatías (alteraciones en los nervios periféricos) paraliticas con la vacuna de la rabia. En el año 1905 Encefalitis (inflamación en el cerebro) con la vacuna de la viruela y en 1922 encefalomielitis (cerebro y medula inflamadas) con la misma vacuna de la viruela. Hace pocos años síndrome de Guillan Barré (toque generalizado de nervios periféricos que puede traer parálisis de músculos intercostales y traer problemas respiratorios) y fue producida por la vacuna de la Influenza. Actualmente se han reportado estas lesiones con la COVID-19 y Coronavirus actual en el SNC (Sistema nervioso Central), así que no es nada nuevo las alteraciones en el SNC y periférico, aun más si una de las vías principales de entrada es por el nervio olfatorio con ramificaciones o sinapsis en el tejido nervioso. Siendo las alteraciones de la olfacción y el gusto muy frecuente como toque neurológico
En forma general hay 4 tipos de vacunas: Inactivas, vivas atenuadas, de subunidades del patógeno y recombinantes, que no voy a describir para no complicar esta información. Hay reacciones autoinmunes (contra el mismo cuerpo), reacciones anafilácticas (alergias), entre otras alteraciones. También en la COVID-19 se ha visto algo de esto y es posible que puedan presentarse con algunas de las vacunas que ya se están colocando y las que se pretenden poner a futuro. También dependerán estas reacciones o no de cada individuo, sus condiciones de su salud y patologías previas o preexistentes.
Hay ciertas vacunas que podrían estar contraindicadas en pacientes inmunodeprimidos por enfermedades autoinmunes, sobre todo las vacunas que contienen organismos vivos como la BCG de la tuberculosis, herpes zóster, fiebre amarilla, sarampión, triple viral (puede haber replicación viral no controlada) todas estas pueden producir alteraciones neurológicas en estas condiciones previas. Con antecedentes del Síndrome de Guillan Barré se reporta que no es muy recomendable la vacuna de la Influenza; hay controversias con estos reportes. Vamos a ver cómo se comporta la vacuna para de coronavirus actual o las pautas a seguir en caso de estos pacientes. También hay ciertos datos que la COVID-19 se han presentado casos muy parecido a este síndrome. Los mecanismos de desarrollo de Encefalomielitis Aguda Diseminada post-vacunal se ha asomado el “mimetismo molecular” (atracción de moléculas semejantes) y se puede ver: en encefopatías (diferentes problemas cerebrales), síndromes piramidales (problemas de movimiento por alteración de vías nerviosas), neuropatía craneal, neuritis óptica (alteraciones de la visión, dolor periorbitario, defectos pupilares reactivos, potenciales evocados visuales anormales), ataxia (cierta forma de desequilibrio), alteraciones del lenguaje, entre otras.
Existen reacciones inflamatorias a la mielina (la capa que envuelve a muchos nervios) y que favorece la conducción nerviosa y se puede ver alterada por algunas vacunas. Las alteraciones desmielinizantes agudas o subagudas pueden ser producidas por reaccione cruzadas de antígenos virales de ciertas vacunas contra la mielina (mimetismo molecular) produciendo una reacción hiperérgica, incluso diseminada. Las más frecuentes que puede producir esto son la del sarampión, varicela-zóster, rubeola, viruela e influenza. Otras como la hepatitis A y B, antineumococo, antimeningococo, BCG, rabia también han sido consideradas. En pacientes con Esclerosis Múltiple todavía hay cierta controversia en este tema en estudio. Todos esperamos las mínimas reacciones y complicaciones neurológicas y de otras esferas del organismo con esta serie de vacunas a implementar en muchos países durante la pandemia y post pandemia este año y el 2022. Si bien el dolor de cabeza, las convulsiones, alteraciones del olfato y gusto, los problemas de ACV isquémico o hemorrágico, alteraciones de nervios craneanos, delirio, confusión, letargo, debilidad entre otro son signos y síntomas neurológicos de la COVID-19, no necesariamente se pueden manifestar con las vacunas contra el enemigo pequeño, pero letal (beta positivo CovSARS-2). El tiempo lo dirá con su evolución e incertidumbre. Sigan cuidándose y cuidando a los demás.
Ruben D. Lopera