El Gobierno ruso ha confirmado este sábado el inicio de la producción de la vacuna contra la COVID-19 que registró esta semana, con vistas a iniciar en octubre una campaña que tendrá como primeros objetivos a los trabajadores de los sectores sanitario y educativo.
El Ministerio de Sanidad ha informado en un comunicado de que “se ha comenzado a producir la vacuna desarrollada por el Centro de Investigación de Epidemiología y Microbiología Nikolai Gamaleya”, bautizada como Sputnik V y registrada el 11 de agosto.
Las autoridades consideran que su seguridad y eficacia están ya probadas, algo que defendió el presidente, Vladimir Putin, al anunciar esta semana el registro de la vacuna. Esta inmunizaría a quienes la reciban durante un plazo de dos años, según la agencia Sputnik.
El centro nacional que coordina en Rusia la lucha contra el coronavirus ha informado este sábado de 5.061 positivos en 24 horas –1.351 de ellos asintomáticos–, hasta un total de 917.800. Moscú, con 695, y San Petersburgo, con 162, son las áreas con mayor número de nuevos casos.
La cifra de fallecidos ha aumentado a 15.617, 119 más que el viernes, mientras que más de 729.000 personas han superado la enfermedad, 6.400 de las cuales han recibido el alta en la jornada previa.