Robin Thicke ha sido acusado de violencia infantil y está siendo investigado por los Servicios Familiares después de que su hijo de solamente seis años le dijera a su madre Paula Patton y contara en la escuela que su padre le había pegado. El pequeño, de nombre Julian, habría dicho en la escuela que había sido golpeado por su padre más de una vez, con el puño y muy fuerte, por lo que la institución educativa decidía denunciarlo la semana pasada.
En ese momento, la esposa del cantante interponía una demanda de emergencia para limitar la custodia compartida que tenía la pareja después de haberse divorciado. La versión de Robin en los papeles que responden a la denuncia es que en alguna vez, muy raramente, le ha dado una cachetada suave en el culo, dentro de la ley y porque esa era la manera de hacer cumplir la disciplina decidida por él y su esposa Paula cuando estaban casados.
Según el músico, todo es una venganza de su ex, porque él no quiso que fuera al funeral de su padre, con quien Paula no tenía buena relación. El juez no ha accedido a limitar las visitas de Robin a Julian, pero ha determinado que la investigación siga adelante.