A pesar de que en mercados internacionales se ha visto una reducción en los precios de los productos que consume la población, esa situación no se ha reflejado en República Dominicana.
De esa manera lo indicó Rafael Paz, dirigente y miembro de la dirección política del partido Fuerza del Pueblo.
“En julio el indicador global del costo de la comida se redujo en un 8.6 por ciento con respecto a junio, hilando la quinta caída consecutiva después de alcanzar máximos históricos a principios de año”, dijo el político, al cuestionar que el Gobierno de la República Dominicana atribuya los altos precios que se reflejan en el país en productos básicos a factores externos como la guerra de Rusia y Ucrania o a la pandemia.
En ese sentido, Paz indicó que uno de los productos que permiten la disminución de ese índice fue el aceite vegetal, cuyo precio retrocedió un 19.2 por ciento de junio a julio para llegar a su marca mínima en diez meses, liderado por los descensos en los mercados mundiales de los principales cereales y aceites vegetales.
Por otro lado, también se refirió al precio del azúcar, otro producto de uso básico en los hogares dominicanos, el cual disminuyó un 3.8 por ciento con relación a ese mismo mes.
“Los precios de los lácteos: leche y derivados, bajaron un 2.5 por ciento de junio a julio, la leche en polvo y la mantequilla también se redujeron” afirmó.
Con relación al petróleo, tema que Paz define como una de las grandes justificaciones del Gobierno para sustentar el aumento de los precios, muestra una baja desde marzo de 115 a 86 dólares el barril. Sin embargo; en República Dominicana esa variedad positiva no ha repercutido en los ciudadanos.
Mientras hacía las comparaciones de precios, Paz trajo a colación un preocupante comentario externado por un ciudadano identificado como Juan Ortega y su lamento sobre la cantidad de dinero que debe dejar sobre la mesa de su hogar para que su familia se pueda alimentar.
“Me decía, Rafa, ahora para dejar la comida en mi casa debo disponer de 800 pesos diarios. Imagínese usted adquirir agua, café, azúcar, pollo, huevos, plátanos, para poder alimentar a sus hijos y a su familia” lamentó.
Frente a esa situación, el joven indicó que, así como es ágil para justificar los aumentos de precios por factores internacionales, asimismo debe el Gobierno dominicano empeñarse en que esas reducciones en los mercados internacionales de los alimentos se traduzcan en mejoría de las condiciones de vida de la gente.
Rafael Paz explicó que el impacto de los aumentos se puede apreciar en lo que recibe la gente y lo que le cuesta vivir.
Para detallarlo mejor, el dirigente de laFuerza del Pueblo puso como ejemplo el salario mínimo en la República Dominicana, el cual oscila entre los 11, 900 y 21,000 pesos dominicanos y el salario promedio 28,502 pesos, según el sistema dominicano de la Seguridad Social.
Por medio de un comunicado de prensa aseguró que esos salarios que perciben los dominicanos con relación al costo de la canasta básica en este país se quedan cortos, ya que, de acuerdo con los datos del Banco Central, la misma tiene un costo que alcanza los RD$42,269 mensual.
“¿Qué está haciendo por la familia dominicana que está pasando hambre?”, cuestionó el político al condenar que el Gobierno encabezado por el presidente Luis Abinader solo esté pensando en reelección.