Jennifer Aniston está sensible y se le nota. Así lo ha demostrado en el Festival de cine de Giffoni en Italia. La actriz tuvo que responder a las preguntas de un grupo de adolescentes. Hasta que una de ellas la emocionó tanto que se echó a llorar desconsoladamente. La cuestión era sencilla.
El joven quiso saber si la actriz había tenido alguna crisis de identidad. Y la estrella se desnudó ante todos contando entre lágrimas su verdad. Atónitos los estudiantes escucharon su respuesta. Aniston contó que no una sino muchas veces ha sufrido crisis y le han surgido dudas. Dice que los famosos también se preguntan si son lo suficientemente buenos o si van a superar todos los problemas.
“Nos pasa a todos los seres humanos, -comenta la estrella-, a una camarera o a un estudiante, al final del día es fácil caer y pensar que no podemos seguir así o que esto es demasiado”. Su respuesta fue optimista. “Solo hay que pensar en que sí puedo para salir adelante”.
Jennifer acabó comentando que todos somos pequeños recipientes vacíos e inocentes y que si nos sentimos mal debemos actuar ya o pedir ayuda. Una faceta de coaching que no conocíamos de Jennifer Aniston y con los que se ha ganado muchos más fans de los que ya presume.