Jennifer Lopez podrá por fin descansar tranquila, después de que un juez haya dictado una orden de alejamiento para un hombre que la ha estado acosando. La estrella se vio obligada a pedir esta protección después de que un fan la siguiera de Los Angeles a Las Vegas y la bombardeara con mensajes y flores. Según los papeles judiciales, el acosador, de nombre Timothy McLanahan, llegó a colarse incluso en la residencia de Jennifer y a ser arrestado por haber lanzado amenazas y tener armas de fuego sin permiso.
La preocupación de la cantante no solamente era por su propia integridad, sino por el bienestar de los pequeños Max y Emme, los gemelos que la cantante tuvo con Marc Anthony, a los que el acosador podría hacer daño. Por esta razón, la orden de alejamiento, que estipula que el acosador no podrá acercarse a menos de 100 yardas (unos 90 metros) incluye no solamente a Jennifer sino también a sus hijos, como posibles objetivos del sujeto. El carácter de la norma es temporal, así que habrá que confiar que a la cantante le conceden una tranquilidad mayor y que su molesto visitante desista de sus empeños.