Naciones Unidas pidió hoy solidaridad para los supervivientes, defensores de los sobrevivientes y de los derechos humanos de las mujeres que trabajan para prevenir y poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas.
“Nuestro deber no es solo solidarizarnos con ellos sino también intensificar nuestros esfuerzos para encontrar soluciones y medidas para detener esta prevenible lacra mundial que tiene un impacto perjudicial en la vida y la salud de las mujeres y las niñas”, señala un comunicado conjunto de los directivos de organismos de las Naciones Unidas.
Recuerdan que más de un tercio de las mujeres en el mundo han sufrido violencia física o sexual en algún momento de sus vidas.
Destacan además que las investigaciones indican que el coste de la violencia contra las mujeres podría ascender anualmente a alrededor del 2 % del producto interno bruto (PIB) mundial, lo que equivale a 1.500 millones de dólares.
Más allá de la sensibilización, los Gobiernos, el sector privado, la comunidad artística, las organizaciones de la sociedad civil, el mundo académico y los ciudadanos comprometidos están buscando nuevas formas de abordar con urgencia esta lacra mundial, agregan los directivos del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Achim Steiner, y de Unicef Henrietta Fore.
También de ONU Mujeres Phumzile Mlambo-Ngcuka, y del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), Natalia Kanem.
“El último año ha sido extraordinario en cuanto a la conciencia que se ha generado sobre el alcance y la magnitud de las diferentes formas de violencia infligidas a mujeres y niñas. La campaña #MeToo, uno de los movimientos sociales más virales y poderosos de los últimos tiempos, ha puesto este tema en el foco de atención”, agrega el comunicado conjunto.
Esta conciencia -señalan- se ha reforzado aún más con la concesión del Premio Nobel de la Paz en 2018 a dos activistas notables, la iraquí yazidí Nadia Murad y médico congoleño Denis Mukwege, que trabajan para poner fin a la violencia contra las mujeres en situaciones de conflicto.
Destacan igualmente que durante más de dos décadas, el Fondo Fiduciario de Naciones Unidas para poner fin a la violencia contra las mujeres (administrado por ONU Mujeres), ha estado invirtiendo en iniciativas nacionales y locales que traducen las promesas políticas en beneficios concretos para mujeres y niñas, y contribuyen a la prevención de la violencia en el largo plazo.
Explican que como parte de la Iniciativa Spotlight para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas, “una asociación mundial entre la ONU y la Unión Europea, que lleva ya varios años, trabaja con diferentes aliados para elevar la escala y el nivel de aspiración de nuestras intervenciones”.
Afirman que reducir y prevenir la violencia contra las mujeres es transformador: mejora la salud de mujeres y niños, reduce los riesgos de contraer el VIH y las infecciones de transmisión sexual, mejora la productividad económica y el logro educativo, y reduce los riesgos de enfermedades mentales y abuso de sustancias, entre otros beneficios.
Destacan además, como parte de Spotlight, que las agencias que dirigen están movilizando una serie de partes interesadas para abordar tanto las causas de la violencia como sus consecuencias más inmediatas.
De acuerdo con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, la iniciativa integra el principio de inclusión y la incorporación de nuevas soluciones para conseguir resultados acelerados.
Afirman que la ONU está trabajando incansablemente con sus aliados para fortalecer los marcos legales e instituciones, mejorar los servicios para los supervivientes y abordar las causas fundamentales de la violencia, al desafiar las normas y conductas sociales y abordar las desigualdades de género más amplias.
“Poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas no es un esfuerzo a corto plazo. Requiere esfuerzos coordinados y sostenidos por parte de todos nosotros”, señalan los directivos.
“Mostrar que estos esfuerzos arrojan resultados es el mejor homenaje a las sobrevivientes y las defensoras de los sobrevivientes y defensoras de los derechos humanos de las mujeres que estamos celebrando hoy”, señalaron.