La espía soviética Goar Vartanian, que logró frustrar un plan nazi para matar a los dirigentes aliados Josef Stalin, Winston Churchill y Franklin Roosevelt ha muerto este lunes a los 93 años de edad, según ha informado el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia (SVR, por sus siglas rusas).
Vartanian, alias ‘Anita’, se convirtió en leyenda de la Inteligencia soviética cuando, junto a otros espías de las URSS, frustró el atentado que la Alemania nazi pretendía llevar a cabo contra Stalin, Churchill y Roosevelt durante la Conferencia de Teherán, en 1943.
El grupo de espías soviéticos en el que trabajaba ‘Anita’ estuvo liderado por el que terminó siendo su marido, Guevork Vartanian, ‘Anri’, con tan solo 19 años, tal y como recuerda la agencia de noticias Sputnik.
“Ella y su marino dejaron en los destinos de numerosos agentes (…) y personas comunes una huella increíble que fue alabada en libros, artículos y películas (…). Él se fue primero, hoy le ha tocado a ella”, ha dicho el SVR.
‘Anita’ nació en 1926 en la ciudad armenia de Gyumri (entonces Leninakán), pero a principios de los años 30 su familia se mudó a Irán y con 16 años se sumó al grupo antinazi dirigido por ‘Anri’.
Se casaron cuando ella tenía 20 años, pero, según reveló la propia Goar en una entrevista con Sputnik en 2015: se enamoró de Guevork cuando tenía 18. “Ayudé mucho a mi marido en el trabajo, participé en operaciones secretas, juntos compartimos fracasos y alegrías”, destacó.
El matrimonio llegó a las URSS en 1951, a donde volvió en 1986 tras una carrera como espías. Dada la importancia de las operaciones en las que participaron, aún se mantienen en secreto.
