Miles de personas despidieron hoy bajo la lluvia 2018 y dieron la bienvenida a 2019 en la emblemática plaza de Times Square de Nueva York, acompañados de una colorida nube de confeti y del descenso de la icónica bola de cristal de más de 5 toneladas.
La bola, de más de tres metros y medio de diámetro se deslizó durante los últimos sesenta segundos de 2018 entre el júbilo, el grito y los aplausos de los presentes, tras lo cual resonó el “New York, New York” de Frank Sinatra.
Hasta un millón de personas, según los organizadores, se congregó para celebrar la llegada del año en un clímax final de confeti, luces y fuegos artificiales, tras presenciar un espectáculo de baile y música de seis horas durante las cuales fue protagonista una fina y persistente lluvia.
Como es tradicional, parte del confeti utilizado, llevaba registrados los deseos que muchos visitantes de Times Square escribieron durante los últimos días del año, alguno de los cuales fueron leídos por varios famosos, como el cómico estadounidense Steve Harvey.
Ataviados con gorros y globos morados y amarillos y bufandas rojas repartidas por los organizadores, muchos participantes dieron la bienvenida a 2019 como marca la tradición: con el “beso de medianoche”, un ritual que, según los supersticiosos, evita 365 días de soledad.
La bola de Times Square, que pesa 5.386 kilogramos, está compuesta por 2.688 triángulos de cristal. Este año se han instalado 192 nuevos “cristales brillantes” como parte de un diseño denominado “regalo de armonía” con el que los organizadores quieren hacer un llamamiento “al acuerdo y la compatibilidad”.
Desde antes del mediodía y entre fuertes medidas de seguridad, los participantes se fueron congregando para celebrar el evento, en el que no se permitía entrar con mochilas, grandes bolsas o paraguas.
La larga espera de los asistentes, que no contaron con baños públicos -algunos acostumbran a ir con pañales-, estuvo amenizada por las actuaciones de Paulina Rubio, Sting, Christina Aguilera, New Kids on The Block o Snoop Dogg así como con la intervención de famosos y presentadores de televisión como la modelo Jenny McCarthy.
La velada, que comenzó a las 18.00 hora local (23.00 GMT) también tuvo un componente solidario en defensa del periodismo y la libertad de opinión, con la participación de la ONG Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, según sus siglas en inglés).
Como otros años, la música latina también tuvo presencia en la velada festiva a través de los intérpretes venezolanos Mau y Ricky Montaner y la cantante argentina Lali Esposito.
Pero fue la cantante neoyorquina Bebe Rexha la encargada de interpretar minutos antes de la media noche, el tradicional himno de paz “Imagine” compuesto por John Lennon, previo al descenso de la luminosa esfera acristalada.
Este año, junto al alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, 11 periodistas han comparecido como “Invitados Especiales” para presionar el botón que hará descender la esfera justo un minuto antes de la medianoche que se deslizó 21 metros durante 60 segundos iluminada por 32.256 bombillas led.
Junto al alcalde y su mujer, el director del Comité para la Protección de los Periodistas, Joel Simon, fue el encargado de dar marcha al mecanismo.
Con ellos también estaban Martha Raddatz de la cadena ABC o Karen Attiah, editor en el Wasington Post del periodista saudí Yamal Khashoggi asesinado por agentes saudíes en Turquía.
Desde 1996, todos los alcaldes de la ciudad han tenido el privilegio de pulsar el botón junto a celebridades y personajes públicos que son elegidos por su aportación o importancia dentro de una comunidad determinada.
Entre los invitados en años anteriores figuran Tarana Burke, fundadora del movimiento MeToo contra el acoso sexual, Bill y Hillary Clinton, Muhammad Ali y Lady Gaga.
Las celebraciones estuvieron acompañadas de estrictas medidas de seguridad, con registros en todos los puntos de entrada y fuerzas especiales antiterroristas desplegadas en las calles colindantes, en las que se empezó a restringir el paso de peatones y el tráfico a partir de las 4.00 a.m. hora local.
La multitudinaria fiesta de fin de año en Times Square es mundialmente conocida y, pese al frío, muchas personas alrededor del mundo viajan a Nueva York expresamente para presenciar el evento.
Los festejos en esa plaza se celebran desde hace 112 años, mientras que el descenso de la esfera, que se ha convertido en todo un icono, se lleva realizando desde 1907.
Fueron los dueños del periódico The New York Times, que en 1904 comenzaron a celebrar la entrada del año en la azotea de su edificio, situado en Times Square, quienes en 1907 empezaron a utilizar una esfera iluminada para marcar el cambio de año.