El índice de ventas de casas usadas en el país bajó un 0,7 % en julio, el cuarto mes consecutivo en el que se registra un descenso, informó hoy la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR, por su sigla en inglés).
Los economistas habían pronosticado que las ventas cayeran un 0,4 % en el séptimo mes del año.
“Demasiados potenciales compradores están siendo descalificados económicamente o están decidiendo posponer su búsqueda hasta que salgan al mercado más casas en su rango de precios”, señaló Lawrence Yun, economista jefe de la NAR.
El precio medio en todo el país fue de 269.000 dólares, un 4,5 % más que en julio de 2017, un aumento que significa el 77° mes consecutivo de subidas.
En cuanto al inventario de casas usadas disponibles en el mercado, en julio descendió un 0,5 % y quedó en 1,92 millones de unidades, que al ritmo de venta actual tardarían 4,3 meses en agotarse.
Las propiedades permanecieron en el mercado un promedio de 27 días en julio, en comparación con los 26 registrados en junio y los 30 días de hace un año.
Así, el 55 % de las viviendas vendidas en julio estuvieron en el mercado durante menos de un mes.
