Las peticiones de subsidio por desempleo en Estados Unidos subieron la pasada semana en 1.000 y se situaron en 218.000, manteniéndose en niveles mínimos desde hace 50 años, informó hoy el Departamento de Trabajo.
Este ascenso fue algo menor de lo esperado por los analistas, que habían pronosticado 220.000 nuevas solicitudes para la semana que terminó el 28 de julio.
En cuanto a la media de solicitantes del subsidio durante el último mes, un indicador más fiable de la marcha del mercado laboral, cayó en 3.500 solicitudes y quedó en 214.500, según el informe del Gobierno.
Las peticiones para contar con las prestaciones por desempleo llevan 178 semanas consecutivas por debajo de la cifra de 300.000, señal de la buena salud del mercado laboral estadounidense.
El total de personas que reciben subsidios por desempleo de manera continuada bajó en 23.000, hasta ubicarse en 1,72 millones, cifra cercana al nivel más bajo desde 1973.
La fortaleza del mercado laboral ha continuado durante el primer año y medio de mandato del presidente, Donald Trump, y en junio el índice de desempleo se situó en el 4 %.