La Unión Europea ha asegurado este lunes que la detención y “secuestro” de, entre otros, la opositora bielorrusa Maria Kolesnikova es “inaceptable” y muestra que la represión en Bielorrusia continúa, cuando se cumplen cinco semanas de movilizaciones ciudadanas contra el presidente Alexander Lukashenko.
“Las detenciones arbitrarias y secuestros por razones políticas en Bielorrusia, incluyendo las acciones brutales contra Andrei Yahorau, Irina Sukhiy y Maria Kolesnikova, son inaceptables”, ha afirmado el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, en un comentario en su perfil de Twitter.
Además, el jefe de la diplomacia europea ha subrayado que las autoridades de Minsk deben cesar las intimidaciones a ciudadanos y las violaciones de sus propias leyes y obligaciones internacionales.
En rueda de prensa en Bruselas, el portavoz de Exteriores de la Comisión ha recalcado que estos casos demuestran la “represión continua” de Minsk contra la población civil y líderes activistas en Bielorrusia.
El Ministerio del Interior bielorruso ha confirmado la detención de 633 personas por participar en las manifestaciones del domingo contra el régimen de Lukashenko, según informa la agencia de noticias estatal Belta.
Minsk alega que los detenidos han incumplido la legislación sobre eventos masivos con su participación en las protestas y ha señalado que en la jornada del domingo se registraron 42 movilizaciones en varios puntos del país que congregaron, según sus cálculos, a unas 31.000 personas.
SANCIONES DE LA UE
La crisis surgida en Bielorrusia tras la proclamación del resultado de las elecciones presidenciales del 9 de agosto, consideradas fraudulentas por la oposición y que han llevado a las mayores manifestaciones de la historia reciente del país, fue respondida rápidamente por la UE que a mediados de agosto anunció que sancionaría a Minsk y acompañaría una transición política en el país.
El asunto fue debatido en una cumbre extraordinaria de líderes europeos que pactaron aplicar restricciones contra una veintena de responsables del fraude electoral y de la represión en la antigua república soviética. Además, la UE instó a abrir un diálogo interno en el país, auspiciado por la OSCE, que todavía no se ha materializado.
Pese a la ágil reacción de la UE, el proceso para definir la lista final de dirigentes bielorrusos que serán sancionados se ha retrasado en su trámite en el Consejo de la UE y no se espera que pueda ser publicado tampoco esta semana, según informaron fuentes comunitarias.
De esta forma, se desconoce todavía el alcance de las sanciones o si se incluirán al propio Lukashenko. Las fuentes consultadas atribuyen la situación al cauce normal que lleva este tipo de decisiones en las instituciones comunitarias y descartan desavenencias en la UE sobre las sanciones.
