La jefa del Gobierno de Hong Kong, Carrie Lam, ha alertado este martes de que la región administrativa especial china no puede tolerar “más caos” tras las últimas manifestaciones registradas con motivo del aniversario de las protestas de 2019.
Más de un millón de personas salieron a la calle hace un año para protestar contra la ley de extradición a la China continental, un movimiento que acabó en la retirada de la medida por parte del Gobierno hongkonés.
“Todos nosotros vemos las dificultades por las que hemos pasado en el último año y debido a las graves situaciones vividas ahora tenemos más problemas a los que enfrentarnos”, ha manifestado Lam durante su rueda de prensa semanal.
Así, ha subrayado la importancia de “aprender de los errores”. “Espero que todos los diputados puedan aprender de ello. Hong Kong no puede tolerar más caos”, ha afirmado.
Esta semana, tras un parón de varios meses debido a la pandemia de coronavirus, los manifestantes y activistas han vuelto a la calle en Hong Kong para llevar a cabo manifestaciones y marchas.
Los activistas y manifestantes antigubernamentales han convocado manifestaciones para este jueves y han anunciado que prevén celebrar el domingo un referéndum sobre la posibilidad de realizar protestas a gran escala contra la ley de seguridad nacional aprobada por el Parlamento chino.
Dicha normativa, que según las autoridades se centrará en aquellos que “pongan en peligro la seguridad nacional”, ha provocado un aumento de la tensión. Para muchos, se trata de un intento de recortar las libertades y derechos de los ciudadanos de Hong Kong.
“Durante el último año, los hongkoneses y el mundo entero han sido testigos del deterioro de la situación en Hong Kong, donde Pekín está aumentando su poder y coartando las libertades”, ha advertido el activista Joshua Wong.
