El periodismo y el sacerdocio son ya las dos profesiones más peligrosas de México, con 33 y 17 muertos, respectivamente, en el actual Gobierno, aseguró hoy la Iglesia católica en su editorial del semanario Desde la Fe.
Bajo el título “Lunes negro”, la Iglesia se sumó a la condena de los asesinatos de los periodistas Javier Valdez y Jonathan Rodríguez y el ataque en el que fue herido el Párroco José Miguel Machorro en la Catedral de la Ciudad de México, todo el lunes pasado.
“En este sexenio (2012-2018) van 33 periodistas caídos, y son 17 sacerdotes los que han dejado de existir bajo circunstancias violentas”, manifestó el editorial.
Lamentó el que la violencia no solo no cese sino que además “esté incontenible” como quedó demostrado el 15 de mayo cuando “el luto cubrió dos brazos que hacen fuerte a nuestra sociedad frente a la corrupción, la impunidad y el delito”.
Valdez fue asesinado en Culiacán, estado de Sinaloa; Rodríguez, en el occidental estado de Jalisco, y Machorro fue herido de gravedad al ser atacado durante la misa en la Catedral.
La Iglesia condenó que la violencia contra periodistas y sacerdotes suceda mientras “los burócratas hacen mesas y más mesas de diálogos estériles” porque “la realidad los tiene rebasados, están perplejos, no saben cómo salir del abismo”.
Los periodistas murieron por desvelar a la sociedad “las alarmantes relaciones entre el crimen y las autoridades que han sido corrompidas por el poder del enemigo”, apostilló.
Denunció que ahora, los sacerdotes también son blanco del crimen “por ser incómodos en la tarea profética de anunciar y denunciar, acusó la Iglesia en el artículo del semanario.
Calificó de imposible el confiar en que las autoridades castigarán a los responsables porque “la realidad dice otra cosas” ya que el 99 %e los crímenes contra periodistas permanecen impunes, y lo mismo puede decirse de los sacerdotes abatidos”.