Paris Jackson reapareció en el escenario de los Grammy para presentar un número musical en el Staples Center, ocho años después de asistir al servicio funeral de su padre en la misma arena.
La joven de 18 años llevaba flores en el cabello y un arete en la nariz el domingo por la noche. Presentó a The Weeknd con Daft Punk en el segundo número musical de la noche.
Fue otro paso en el ascenso de la única hija mujer de Michael Jackson. Recientemente la joven posó para la portada de Rolling Stone y le dio una larga entrevista a la revista. Paris ha comenzado a modelar y actuar, y como buena hija del Rey del Pop, también compone y canta.
Paris estuvo invitada a la fiesta de Clive Davis previa al Grammy el sábado en Beverly Hills.
En 2009, Jackson tenía 11 años cuando acompañada por su familia en el funeral de su padre dijo: “Papi ha sido el mejor padre que se puedan imaginar, solo quiero decir que lo quiero mucho”.
El domingo pasó rápidamente por la alfombra roja y casi no habló con los medios. Llevaba un vestido de lentejuelas muy escotado y el cabello suelto.
Bajo los reflectores de los Grammy, aprovechó el momento para hablar de una causa mayor.
“Podemos usar este tipo de emoción en una protesta contra un ducto”, dijo al público en aparente referencia al controvertido ducto petrolero de Dakota Access.
Viendo al público agregó que “todos se ven tan hermosos, especialmente Beyonce”.
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Por BETH HARRIS
