El flujo marítimo de inmigrantes cubanos que buscan tocar tierra en Estados Unidos se ha detenido desde enero, cuando el expresidente Barack Obama puso fin a la política de “pies secos/pies mojados”, informó hoy el comandante de la Guardia Costera, el almirante Paul Zukunft.
De acuerdo con Zukunft, desde que Obama (2009-2017) derogó esa política la Guardia Costera tan solo ha interceptado a un centenar de cubanos que intentaban llegar a Estados Unidos por mar, comparado con los cerca de 10.000 de 2016.
“El flujo se ha detenido”, dijo Zukunft durante un acto con periodistas en el Center for Media and Security de Nueva York.
La política de “pies secos/pies mojados” permitía a los cubanos que tocaban tierra (pies secos) la posibilidad de obtener la residencia permanente en EE.UU. un año después de llegar, incluso si lo hacían ilegalmente, mientras que los interceptados en el mar (pies mojados) eran devueltos a la isla.
Obama puso fin a esa política -adoptada por el expresidente Bill Clinton (1993-2001) en 1995- pocos días antes de abandonar la Casa Blanca en el marco de la normalización de las relaciones bilaterales con Cuba iniciadas en diciembre de 2014 junto al líder cubano, Raúl Castro.
El almirante Zukunft dijo que la decisión de Obama ha puesto fin a situaciones peligrosas a las que quedaba expuesta la Guardia Costera cuando los “balseros” trataban de llegar a Estados Unidos pese a ser interceptados en el mar.
“Estoy hablando de automutilación, de heridas de arma de fuego autoinfligidas, acciones muy desesperadas para ser evacuados a un hospital de Estados Unidos y ser declarados ‘pies secos’ y luego puestos en libertad”, explicó.
“Estaba poniendo a nuestra gente en riesgo. Teníamos interdicciones en las que amenazaban con ahogar a un bebé si tratábamos de detenerlos”, añadió el comandante de la Guardia Costera.
Zukunft explicó durante el acto que los recursos que la Guardia Costera destinaba a interceptar inmigrantes pueden dedicarse ahora al narcotráfico.
De acuerdo con el comandante, la Guardia Costera tuvo constancia de 580 envíos de droga que no pudo interceptar porque “no tenía suficientes barcos o aviones” para ello.
“Quizás pueda cerrar un poco más esa ventana si no tenemos tantas interdicciones migratorias en el mar”, dijo.
No obstante, el comandante de la Guardia Costera alertó que la construcción del muro en la frontera sur con México prometido por el presidente, Donald Trump, puede desembocar en un nuevo aumento de cruces marítimos.
“Si no puedes hacer el camino a través de la frontera terrestre, será por defecto la frontera marítima. No hemos visto ese cambio todavía, pero es algo que estamos vigilando de cerca”, apuntó.
El número de cubanos que trataron de alcanzar Estados Unidos por mar para beneficiarse de “pies secos/pies mojados” experimentó un gran incremento durante el último año de Obama en la Casa Blanca a raíz de la normalización de relaciones con Cuba.
Anteriormente, durante el año fiscal 2014, la Guardia Costera había interceptado a 2.059 cubanos en el mar.