La derrota en las elecciones primarias fraudulentas del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) a Leonel Fernández y que se alzara con el triunfo Gonzalo Castillo; fue el inicio a la despiadada venganza del león en contra del Danilismo y los morados. Los resultados de un programa de algoritmo sembró la semilla de la discordia y el plan maquiavélico de hacer todo lo posible por destruir al entonces presidente Danilo Medina y su mafia familiar en el poder.
Todo comenzó con una supuesta reunión entre Leonel Fernandez y Luis Abinader a mediados de octubre del 2019 en la calle Pedro Henríquez Ureña #127, Torre Romanza en esta capital, para darle forma a un plan de apoyo incondicional a partir de una segunda vuelta, entre otros puntos, a favor de quien todavía está en la contienda electoral.
Fernández estaba en la calle buscando cobrar favores que lo enmarcaron en una candidatura presidencial con otro partido político. A pesar que la Ley Electoral de Partidos, artículos 134, de la Ley 15-19 prohíbe puntualmente sobre transfuguismo de las candidaturas. Establece que las personas que hayan sido nominadas para ser postuladas por un partido, agrupación, movimiento político o alianza a la cual pertenezca el mismo, a un cargo de elección, no podrán ser postuladas por ningún otro partido, agrupación, movimiento político o alianza, en el mismo proceso electoral.
Otro obstáculo de frente a las aspiraciones presidenciales en el 2020 del mejor discípulo de Juan Bosh, es la Ley 33-18 de Partidos, Agrupaciones y Movimientos Políticos, en su artículo 49, establece el requisito para ostentar una precandidatura, no debe haber participado como candidato por otro partido, agrupación o movimiento político para el mismo evento electoral.
El protagonista para sumcumbir estos retos políticos en el camino de Fernández era el entonces presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE), Román Jáquez Liranzo. Este ostenta su primera posición en (TSE) como juez suplente designado, y adivinen ¿Quién lo juramenta oficialmente el 27 de diciembre del 2011? Leonel Fernández.
Este sale y compra los intereses del Partido De los Trabajadores Dominicanos (PTD), de tendencia izquierda y nace “Leonel Fernández Presidente” o mejor conocido como La Fuerza del Pueblo, (LFP). Esta es la nave del transfuguismo y salen en estampida los leales peledeistas de Leonel a trabajar por la cuarta postulación presidencial del destructor de las empresas estatales.
Esta es la razón por la que Jáquez Liranzo paga su deuda a Leonel Fernández cuando el Tribunal Superior Electoral rechazó una demanda incoada por Francisco Antonio Ventura Felipe en contra de la proclamación de este como candidato presidencial y se aprobó el cambio de nombre de ese partido para denominarse Fuerza del Pueblo.
Llegan las elecciones presidenciales del 5 Julio del 2020, y en la primera vuelta sale ganador Luis Abinader. Aunque él no fue el único gran ganador, el partido La Fuerza del Pueblo se estableció como segunda mayoría del Congreso Nacional, ganó un puesto en el Consejo Nacional de La Magistratura (CNM) con la elección de Bautista Rojas Gómez quien es senador de la provincia hermanas Mirabal.
Solo Leonel Fernández puede asegurar que su excandidata vicepresidencial de la Fuerza del Pueblo y el Partido Reformista, Sergia Elena de Seliman, fue designada como Miembro de la Junta Monetaria. Esto asienta dentro de la fauna política dominicana los tentáculos de influencia y poder del prodigio de Villa Juana.
Todavía peor se nos vende la necesidad de una Junta Central Electoral (JCE) independiente y apolítica, pero el ganador de tan importante posición es el mismo Roman Jácquez que ha favorecido grandemente los intereses del catedrático e intelectual Fernández. Por esta razón, Leonel se posicionó como la segunda fuerza política del país. Sus pasos han cumplido dos metas fundamentales, la destrucción del PLD y sacar del poder a Danilo Medina.
Nosotros tenemos la responsabilidad histórica de no permitir jamás que Leonel Fernández y Danilo Medina vuelvan a ocupar la presidencia del país. Estos dos hombres han promovido la corrupción y el despilfarro del patrimonio nacional.
A pesar que Leonel ha podido posicionarse para seguir sus aspiraciones presidenciales, nosotros debemos tener siempre presente que La Fuerza del Pueblo, es otra sucursal del PLD. Es el mismo caso que el lobo feroz vestido de abuelita, esperando su oportunidad para comerse la caperucita roja. Oh se me olvidaba, ¡Feliz Cumpleaños Dr. Fernández!