El Senado de Estados Unidos ha aprobado por unanimidad una resolución que permite convertir en fiesta nacional la festividad de ‘Juneteenth’, que se celebra el 19 de junio y conmemora el fin de la esclavitud en el país norteamericano.
La legislación ha ganado notoriedad después de las fuertes protestas registradas en el país contra el racismo y la brutalidad policial, enmarcadas en el movimiento Black Lives Matter (Las Vidas Negras Importan) tras la muerte de George Floyd a manos de agentes de Policía.
Sin embargo, el senador republicano por Wisconsin Ron Johnson había bloqueado la medida en 2020 por considerar que el día festivo supondría un coste de millones de dólares para los contribuyentes, según informaciones de la cadena CNN.
Sin embargo, Johnson ha retirado ahora sus objeciones, lo que ha allanado el camino para la aprobación de la resolución en el Senado. “Aunque apoyo celebrar la emancipación, objeté por el coste y la falta de debate”, ha aseverado Johnson.
El texto tendrá ahora que pasar por la Cámara de Representantes antes de ser ratificado por el presidente, Joe Biden. El ‘Juneteenth’ conmemora el día en que la declaración de emancipación firmada por el presidente Abraham Lincoln en 1863 se hizo efectiva en Texas, el último de los estados en proclamar la decisión, dos años después del decreto. Un total aproximado de 250.000 esclavos negros fueron liberados ‘de facto’ en ese estado el 19 de julio de 1865.
Para buena parte de la población afroamericana del país, el ‘Juneteenth’ representa una festividad mucho más sentida que el Día de la Independencia, por las asociaciones negativas que esta última conlleva como prolegómeno del periodo de la esclavitud en Estados