“Llegará el día en que termine esta horrible guerra y volveremos a ser personas como los demás, y no solamente judíos.” Ana Frank
El Holocausto será siempre una advertencia para todo el mundo de los peligros del odio, el fanatismo, el racismo y los prejuicios, la palabra holocausto significa “destrucción total”, esta palabra se asocia con la Segunda Guerra Mundial y el asesinato en masa de judíos por parte de los nazis.
La palabra original en griego significaba “todo quemado”.
Por lo menos desde 1942, sin embargo, la palabra se utiliza más a menudo para describir el exterminio de los judíos por los nazis, algunas personas se oponen a las connotaciones religiosas de la palabra, sin embargo, prefieren utilizar la Shoah hebrea (catástrofe) en su lugar.
El término “genocidio” no existía antes del Holocausto; el abogado judío polaco Raphael Lemkin lo acuñó en 1943-4 en respuesta a los crímenes Nazi.
El 27 de enero de 1945 fue liberado el mayor campo de concentración nazi, el de Auschwitz-Birkenau, en lo que hoy es Polonia, por las tropas soviéticas desde su apertura, en mayo de 1940, en ese centro, custodiado por la SS alemana, fueron asesinadas cerca de 2,5 millones de personas por la dictadura nazi, en su mayoría, judíos, pero también a prisioneros de guerra, disidentes del régimen, personas discapacitadas, homosexuales y personas de las etnias roma y sinti consideradas indeseables por ser ajenas a los ideales del régimen nazi, fueron arrestados y trasladados a los campos de concentración donde se orquestó un plan de aniquilación racial.
El exterminio las víctimas murieron principalmente fusiladas por los comandos móviles que acompañaban al ejército alemán, más tarde fueron transportadas a campos de concentración por razones de logística, eficiencia y reducción de costos, aunque los fusilamientos continuaron hasta el final de la guerra
Esa la industria de la muerte en la que abundaron las fallas repetidas en los instrumentos de ejecución como es el caso del campo de muerte Belzec; el diseño fallido de los camiones móviles de la muerte usados en Chelmno y en Yugoslavia; el fracaso inicial del ladrillo en las chimeneas del crematorio en Auschwitz, una ingeniería dispuesta no para alcanzar objetivos políticos o militares, sino por la crueldad en sí misma, Ciencia, técnica, barbarie y civilización.
En total, los nazis asesinaron a al menos seis millones de personas. Alemania también tiene una responsabilidad colectiva por la muerte y el sufrimiento de muchos millones de personas más en el continente europeo y en otros países.
El Holocausto no solo marcó a Alemania y a Europa, sino también a muchos otros países del mundo y las vidas de una segunda generación siendo inocente, le fue impuesta una carga de memoria con la que han tenido que vivir: ellos llevan los nombres de familiares muertos en el Holocausto, lleva consigo, así, la cicatriz, aunque no la herida. Crecieron sin raíces genealógicas, sin fotos de familia, entre los susurros de un pasado que no conocieron, entre insomnios, pesadillas y fobias; entre temas de los que no se hablaba.
El silencio fue parte de sus vidas y el cristal a través del cual visualizaron la realidad
Alemania, cargada de responsabilidad por esa siniestra parte de su historia, se hace hincapié en la educación acerca del Holocausto y su recuerdo permanente, así como en ampliar el conocimiento de las causas y consecuencias de esos crímenes, ya que esa es la única manera de que nunca más se repitan, por lo que esta fecha es una clara señal de que la lucha contra el antisemitismo, el racismo y toda forma de intolerancia, racial, religiosa, étnica o de género, aún continúa.
Siempre que haya indicios de una visión del mundo que se base en perseguir a quienes piensan o actúan de manera diferente a lo establecido, existe el peligro de que esa intolerancia pueda conducir a actos violentos contra ciertos grupos humanos
Por lo que, en 2005, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 27 de enero como el Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto, en homenaje a la liberación del campo de concentración y exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau en 1945.
Hoy es una fecha para ratificar el compromiso de lucha contra el antisemitismo, el racismo y toda forma de discriminación y violencia que vulnere los derechos humanos y las libertades fundamentales de todas las personas, creemos un mundo en el que se respete la dignidad, la diversidad y que la paz sea permanente.
Si bien el mundo continúa sufriendo los efectos de tales crímenes y los mecanismos de prevención no son todavía suficientemente efectivos, se ha producido un enorme cambio en la percepción y respuesta de la comunidad internacional ante estas atrocidades.
Las cortes y los tribunales internacionales son importantes en la lucha contra la impunidad y en la prevención de futuras violaciones de los derechos humanos y del derecho humanitario internacional, jugando de esa forma un papel importante al recrear el sentido de justicia para las víctimas y las comunidades afectadas, y alentar medidas nacionales de reconciliación. Además, han logrado generar un considerable efecto disuasivo.
“Negar hechos históricos, especialmente en un tema tan importante como el Holocausto, es simplemente inaceptable. Como también es inaceptable pedir la eliminación de un Estado o pueblo. Me gustaría ver que este principio fundamental es respetado tanto en la teoría como en la práctica por todos los miembros de la comunidad internacional”. Ban Ki-moon
Araceli Aguilar Salgado Periodista, Abogada, Ingeniera, Escritora, Analista y comentarista mexicana, del Estado de Guerrero, México.