Las familias estadounidenses deberán ‘rascarse’ el bolsillo más de lo habitual para celebrar este año la tradicional cena del ‘Día de Acción de Gracias’, ya que el precio medio del menú habitual en esta festividad se ha incrementado un 13,7% respecto del año pasado, lo que supone el mayor encarecimiento interanual desde al menos 1986, según los datos facilitados por la Federación de Granjeros de América (AFBF por sus siglas en inglés).
De este modo, el coste del festín, que reunirá este jueves en torno a la mesa a las familias estadounidenses, se ha situado en 53,31 dólares (47,52 euros) en el caso de una cena para diez comensales, lo que supone un coste inferior a 6 dólares por persona, frente al coste de 46,90 dólares (41,80 euros) de la cena del año pasado.
El ‘lobby’ de los granjeros y ganaderos estadounidenses, cuyas estadísticas se remontan a 1986, destaca que el principal factor detrás de esta subida récord del coste de la cena es el encarecimiento del 23,7% del precio del pavo, elemento clave del festín, que ha alcanzado los 23,99 dólares por una pieza de 16 libras, frente a los 19,39 dólares de 2020.
“Varios factores contribuyeron al aumento del coste promedio de la cena de Acción de Gracias de este año”, dijo Veronica Nigh, economista senior de AFBF, en referencia al impacto en los precios de las interrupciones registradas en la economía y las cadenas de suministro del país durante los últimos 20 meses, así como por la presión inflacionaria, la dificultad para predecir la demanda durante la pandemia y una alta demanda mundial de alimentos.
Además, señaló la economista, “la tendencia de los consumidores a cocinar y comer en casa con mayor frecuencia debido a la pandemia ha provocado una mayor demanda en los supermercados y un aumento de los precios de los alimentos al por menor en 2020 y 2021, en comparación con los precios previos a la pandemia en 2019”.
Los mercados estadounidenses permanecerán cerrados este jueves con motivo de la celebración de Acción de Gracias y este viernes, coincidiendo con el ‘Black Friday’, abrirán únicamente media sesión.
El índice de precios al consumo (IPC) de Estados Unidos se situó el pasado mes de octubre en el 6,2%, lo que supone un incremento de ocho décimas respecto al dato de septiembre y la tasa más elevada registrada en el país desde noviembre de 1990.
Los precios de los alimentos experimentaron un encarecimiento anual del 5,3% en el décimo mes del año, siete décimas más que en el mes anterior. De su lado, la inflación se disparó un 30%, desde el 24,8% de septiembre.
De este modo, sin tener en cuenta el impacto de los precios de la energía y los alimentos, la tasa de inflación subyacente de Estados Unidos se situó en el 4,6%, seis décimas más que el mes anterior.
En términos mensuales, la inflación experimentó en octubre un crecimiento del 0,9%, frente al 0,4% observado durante septiembre. El dato subyacente se elevó un 0,6%, cuatro décimas más que en el mes anterior.