Washington, .- La defensa de la exsoldado Chelsea Manning, fuente de la filtración masiva de documentos confidenciales del Gobierno a WikiLeaks, pidió hoy su puesta en libertad a la espera de que se falle su recurso de apelación después de que fuera detenida por negarse a declarar ante un juez.
Los abogados defensores revelaron en un comunicado que interpusieron un recurso el pasado 29 de marzo ante la Corte de Apelaciones del Cuarto Distrito y han solicitado que la acusada pueda salir de la cárcel previo pago de una fianza mientras espera la respuesta a su apelación.
Manning fue enviada a prisión el pasado 8 de marzo y permanecerá recluida hasta que testifique o hasta que el gran jurado que lleva el caso haya completado sus investigaciones sobre WikiLeaks, según ha dictaminado el juez federal Claude Hilton, de Alexandria (Virginia).
En su nota, la defensa de la exsoldado recordó que ella se negó a declarar porque la Corte de Distrito no tuvo en cuenta pruebas que habrían evitado que tuviera que testificar ante un gran jurado.
Un grupo de apoyo a la exsoldado, autodenominado “Chelsea Resist!”, condenó hoy en un comunicado el “confinamiento solitario” a la que ha sido sometida durante su encarcelación en el centro de detención de adultos William G. Truesdale, en Alexandria.
“Desde su llegada a Truesdale el 8 de marzo, Chelsea ha permanecido en una segregación administrativa o ‘adseg’ (en inglés), un término diseñado para parecer menos cruel que ‘confinamiento solitario”, indicaron.
“Sin embargo -advirtieron-, Chelsea ha permanecido en su celda durante 22 horas al día. Este tratamiento califica como ‘confinamiento solitario”.
El movimiento denuncia que Chelsea no puede salir de su celda mientras otros prisioneros lo están, por lo que no puede hablar con otras personas o visitar la biblioteca, y no tiene acceso a libros o material de lectura.
El pasado 8 de marzo, la exsoldado fue mandada por un juez a la cárcel después de que se negara a contestar preguntas sobre la publicación de secretos militares hace nueve años.
Manning fue condenada en 2013, cuando aún era conocida como el soldado Bradley Manning, a 35 años de prisión como responsable de la mayor filtración de documentos confidenciales de la historia del país.
El 17 de mayo de 2017 fue liberada después de siete años privada de libertad, una quinta parte de la pena que le había sido impuesta, gracias al perdón que le otorgó en enero de ese año el entonces presidente, Barack Obama (2009-2017), tres días antes de abandonar la Casa Blanca.
Mientras era analista de inteligencia militar, Manning filtró en 2010 al portal WikiLeaks más de 700.000 documentos clasificados como secretos sobre las guerras de Irak y Afganistán y cables del Departamento de Estado, lo que supuso un revés para la diplomacia estadounidense y alimentó un debate sobre el papel de Washington en el mundo. (EFEUSA)