Bill Clinton.—
Hoy enfrentamos un asalto sin precedentes a nuestro Capitolio, nuestra Constitución y nuestro país.
El asalto fue alimentado por más de cuatro años de políticas de envenenamiento que difundieron desinformación deliberada, sembraron desconfianza en nuestro sistema y enfrentaron a los estadounidenses entre sí. El partido fue encendido por Donald Trump y sus más ardientes facilitadores, incluidos muchos en el Congreso, para anular los resultados de una elección que perdió.
La elección fue libre, el recuento fue justo, el resultado es definitivo. Debemos completar la transferencia pacífica de poder que exige nuestra Constitución.
Siempre he creído que Estados Unidos está formado por gente buena y decente. Todavía lo hago. Si eso es lo que realmente somos, debemos rechazar la violencia de hoy, pasar página y avanzar juntos, honrando nuestra Constitución, manteniéndonos comprometidos con un gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo.