Bolivia ha registrado en las últimas horas cerca de 80 muertes por coronavirus, lo que supone la cifra más alta de fallecidos diarios desde el inicio de la pandemia en la nación andina.
El Ministerio de Salud ha informado de que en estas 24 horas se han contabilizado 79 decesos por COVID-19, para un total de 2.407 fallecidos. Para encontrar una cifra similar de muertes diarias hay que remontarse al 2 de julio, con 78.
Una de las víctimas mortales es el secretario de Salud de Santa Cruz, Óscar Urenda, una de las caras visibles de la lucha contra la COVID-19 en Bolivia. De hecho, el Gobierno regional ha destacado que contrajo la enfermedad “mientras combatía esta pandemia”. Ha estado 46 días en cuidados intensivos, según la nota oficial.
En la pasada jornada se sumaron además 1.117 nuevos casos de coronavirus, con lo que el balance asciende ya a 65.252, de los cuales 42.815 permanecen activos y 20.030 se han recuperado.
Por provincias, la más afectada sigue siendo Santa Cruz, con 31.656 contagios, seguida de La Paz (11.943), Cochabamba (7.047), Beni (5.193), Tarija (2.594) y Oruro (2.506), mientras que Chuquisaca, Potosí y Pando tienen entre 1.000 y 2.000 casos.