El presidente Joe Biden emprende este jueves una gira internacional vigorizado por los resultados de las elecciones legislativas en Estados Unidos, que le permitirán consolidar ante tres foros multilaterales -la COP27, la Asean y el G20- su imagen de defensor de la democracia ante China y Rusia.
El viernes, Biden participará en la conferencia de Naciones Unidas sobre el clima (COP27), que tiene lugar en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij.
Al día siguiente viajará a Camboya para asistir a la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y la próxima semana estará en Bali, Indonesia, para la cumbre del G20 de potencias industrializadas y emergentes.
La comunidad internacional aguardaba los resultados de las elecciones de medio mandato para saber cómo se erigiría el presidente Joe Biden a nivel internacional.
¿Seguiría defendiendo que Estados Unidos lidera la lucha por la democracia contra los modelos autocráticos de China y Rusia? ¿O saldría como un líder debilitado y amenazado por un posible regreso de su predecesor Donald Trump al poder?
El jueves, según avanzaba el recuento de votos, los republicanos del expresidente Donald Trump parecían encaminados a obtener la mayoría en la Cámara de Representantes, pero con una victoria mucho menor de la que se esperaba.
El dirigente demócrata, de 79 años, celebró el resultado de los comicios, organizados dos años después de la elección presidencial y consideradas como un referéndum sobre el ocupante de la Casa Blanca.
“[Nuestros aliados internacionales] estaban muy preocupados por saber si seguíamos siendo la democracia libre que éramos, y si nuestras normas e instituciones importaban”, dijo Biden.
“Con sus votos, el pueblo estadounidense ha hablado y ha demostrado una vez más que la democracia encarna lo que somos”, añadió.
– “Como un examen” –
La gira de Biden coincide con el regreso a la escena internacional del presidente chino Xi Jinping, reforzado tras conseguir un histórico tercer mandato. Ambos líderes se reunirán el lunes en Bali al margen de la cumbre del G20.
El G20 es “como un examen” para Joe Biden, analizó Ash Jain, del laboratorio de ideas Atlantic Council. Por un lado, el mandatario desea reforzar el campo democrático. Por otro, busca negociar con regímenes autocráticos, colocándose en una posición de fuerza.
Rusia y China suelen celebrar “la disfunción” de la vida política estadounidense, continuó el experto. Pero los resultados de los comicios no les ofreció la oportunidad de alegrarse.
Los expertos entrevistados por AFP creen que Biden tratará también de colocar a Estados Unidos como líder en otros temas.
En la COP27, el presidente estadounidense recordará que su país aprobó este verano una ley que invierte 369.000 millones de dólares en proyectos de energía verde e iniciativas climáticas.
“Por primera vez, Estados Unidos va por el buen camino en lo que respecta al cambio climático”, dijo Joseph Majkut, experto en energía del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS).
Joe Biden querrá “hacer una especie de gira de honor”, continuó.
En Asia, el dirigente alabará la fortaleza de la economía estadounidense que, a pesar de la inflación, sigue teniendo un bajo nivel de desempleo e incluso crea puestos de trabajo.
Ante una China “que tropieza con el crecimiento económico”, Biden tendrá “un poco de viento en popa” cuando se siente a la mesa, dice Matthew Goodman, experto en economía del CSIS.
Pero el contexto favorable no borra las dudas de los aliados de Estados Unidos y sus rivales autocráticos respecto a la longevidad de la doctrina de Joe Biden, que cumple 80 años el 20 de noviembre.
El mandatario dijo el miércoles que tenía la “intención de presentarse de nuevo” para un segundo mandato en 2024, pero su tono cauto contrasta con la actitud revanchista de Donald Trump.
Y aunque el expresidente no se presente a la reelección, la política exterior aislacionista que defendió sigue siendo ampliamente compartida en Washington.