El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha advertido este lunes de que Rusia responderá “oportunamente” al despliegue de misiles por parte de países occidentales cerca de sus fronteras, si bien ha señalado que no prevé desplegar misiles de alcance medio e intermedio en su territorio.
“No prevemos producir ni desplegar misiles de alcance medio e intermedio en la parte europea de Rusia ni tampoco en otras regiones del país. Pero debemos estar preparados para dar una respuesta oportuna al despliegue de misiles por países occidentales cerca de nuestras fronteras”, ha dicho Putin en una reunión con representantes del Ministerio de Defensa ruso.
El mandatario ha reiterado que los enfoques de Rusia en el ámbito militar “tienen un carácter puramente defensivo”, antes de aludir a unas “posibles variantes” de la situación geoestratégica y político-militar. En este sentido, ha informado de que se ha concluido “la planificación de la defensa del Estado para los próximos cinco años”.
El líder ruso ha calificado de “difícil” la situación político-militar en el mundo, destacando los altos riesgos de una escalada de la situación en Transcaucasia, Oriente Próximo, África y otras regiones.
Durante la reunión, Putin también ha indicado que la triada nuclear rusa –que incluye misiles intercontinentales, submarinos atómicos y la aviación estratégica– “permite garantizar la seguridad de Rusia”.
Así, ha advertido de que la velocidad de la modernización de las armas en el mundo supera “la de la Fórmula 1, son velocidades cósmicas”, por lo tanto, si Moscú se detiene, comenzará a quedarse atrás.
Según el mandatario, el objetivo inmediato consiste en que las armas modernas representen en 2021 el 88,3 por ciento del armamento de las fuerzas de disuasión nuclear, mientras para 2024 en todas las tropas esa cifra debe alcanzar un 75,9 por ciento.