El candidato a las primarias del Partido Demócrata y senador por el estado de Vermont Bernie Sanders ha dicho que planea reducir sus actos de campaña tras sufrir un ataque al corazón en Las Vegas la semana pasada.
“Creo que vamos a cambiar la naturaleza de esta campaña”, ha dicho el candidato en la puerta de su casa de Burlington tras una visita al cardiólogo. “Me aseguraré de que tengo la fuerza para hacer lo que tengo que hacer”, ha afirmado.
Sanders, de 78 años, ha dicho que probablemente deba bajar el ritmo que lleva de tres o cuatro mítines diarios, a veces en varios estados. El político ha reconocido que los votantes podrían tener en cuenta su edad y su estado de salud a la hora de votar.
“Mira, todo lo que ocurre todos los días pesa sobre cómo te percibe la gente”, ha añadido el senador, destacando que hay que mirar la imagen completa de un candidato, sus valores, su integridad y su historia. “Llevo luchando por las familias trabajadoras toda mi vida adulta”, ha asegurado.
Sanders es el candidato demócrata de mayor edad, seguido por el exvicepresidente Joe Biden, de 76 años, y la senadora por Massachusetts Elisabeh Warren, de 70 años. El político ha lamentado que ha sido “tonto” al haberse ceñido a un horario tan exigente sintiéndose “más cansado de lo habitual”.
La semana pasada, Sanders se dirigía a sus seguidores en Las Vegas cuando interrumpió el evento para pedir una silla. Fue trasladado al hospital, donde los médicos determinaron que sufría un ataque al corazón, y permaneció allí durante tres días.
“Si hay un mensaje que quiero transmitir es que quiero que la gente preste atención a sus síntomas”, ha alentado el candidato. No está claro cuándo regresará Sanders a los actos de campaña, pero sí planea participar en el debate de la CNN el 15 de octubre en Ohio.