El internacional mexicano, Carlos Vela, último de los jugadores del países vecino que se ha visto “cautivado” por la Liga Profesional de Fútbol de Estados Unidos (MLS), fue categórico en su presentación como primer jugador designado de la nueva franquicia Los Angeles FC, al decir que su meta no es otra que ser “el más grande” de todos.
Nada nuevo, ya que sus compañeros de selección los hermanos Giovani y Jonathan dos Santos, que ya se encuentran con el equipo rival y vecino del Galaxy de Los Angeles, también llegaron con la misma promesa y meta.
Pero, Giovani, que está en la liga desde la temporada del 2015, hasta el momento no ha podido conseguir nada de lo que prometió cuando llegó al equipo angelino, que desde hace 15 días tiene también a su hermano Jonathan.
Ambos esperan darle nueva vida al Galaxy que se encuentra en el antepenúltimo lugar de la clasificación de la Conferencia Oeste, con un entrenador despedido, Curt Onalfo, y la llegada del veterano Sigi Smchid, que a su vez también lo echaron los Sounders FC de Seattle en pasado verano.
Vela será el jugador estrella de la nueva franquicia de Los Angeles FC, que comenzará a competir la próxima temporada bajo la dirección del entrenador Bob Bradley, exseleccionador de Estados Unidos, que no ha tenido suerte en su experiencia en el fútbol egipcio, noruego, francés e inglés, al ser despedido de todos ellos.
Bradley vuelve a la MLS, en la que ya dirigió antes de llegar a la selección, por la puerta de atrás y con menor categoría que la que dejó cuando fue despedido del cargo de seleccionador nacional.
La incorporación de Jonathan y Vela a la MLS se da cuando su nivel futbolístico ha perdido valor en las mejores ligas de europeas como son la española, la inglesa, alemana, italiana, francesa y inclusive la portuguesa.
A pesar que Vela a su llegada a Los Angeles aseguró que podía jugar en cualquiera de los mejores equipos de Europa, la realidad es muy diferente, de hecho siempre ha ido de más a menos.
Vela, que estará hasta en enero en la Real Sociedad, equipo al que dejará tras completar una trayectoria llena de altibajos, pero como segundo máximo goleador en la historia del club, a sus 28 años eligió la opción de competir en una liga menor y a la que llega pensando que con su nombre lo va a ganar todo.
A pesar que el nivel futbolístico en la MLS sigue muy por debajo de la Liga de México y a años luz de las europeas, Vela se presentó con su nuevo equipo con promesas que le pueden dejar hipotecado su futuro como profesional en Estados Unidos.
Aseveraciones como que “vamos a conseguir títulos, buscaré ser el mejor jugador en la historia de la MLS, y que lograremos cosas increíbles” van a estar presentes desde el primer día que salte al campo y se ponga el uniforme de su propio equipo.
Por la MLS ya han pasado con más pena que gloria grandes figuras del fútbol internacional, los últimos ejemplos han sido las leyendas inglesas como David Beckham, Frank Lampard y Steven Gerrard, entre otros.
Beckham tuvo que esperar tres años antes de integrarse al equipo, donde recibió la crítica de su excompañero Landon Donovan por la falta de entrega y sacrificio que ponía en cada partido de cara al juego colectivo.
Sólo cuando Beckham trabajó en equipo y con Donovan de gran líder, el Galaxy logró el título de la MLS en las dos últimas temporadas que completó el jugador inglés del contrato multimillonario por cinco años, del 2007 al 2012.
Precisamente desde que Donovan dejó al Galaxy, el equipo angelino no ha podido conseguir el título de liga, a pesar de tener desde el 2015 a su compatriota Giovani dos Santos, que también llegó procedente del fútbol español, el Villarreal, con la promesa que iba a “conseguir títulos”.
Vela debe conocer la historia de como funciona el mundo del deporte profesional en Estados Unidos, en cuanto al proceso de reconstrucción de las nuevas franquicias en las que a pesar de tener jugadores de la clase del español David Villa, con el New York City, y el brasileño Kaká (Orlando City), no han podido disputar una final de la MLS en las tres temporadas anteriores de competición.
Esta temporada los ejemplos son las dos nuevas franquicias del Atlanta United y el Minnesota United que han comenzado su andadura en la MLS sin que hasta el momento hayan destacado, ni estén entre los equipos que puedan luchar por el título.
Vela, que ya puede expresarse perfectamente en inglés, reconoció que la idea de llegar a la MLS era algo que ya tenía en mente desde hacía tiempo y que está convencido que había elegido la mejor opción profesional de cara a su futuro deportivo. Los resultados serán los que a partir del 2018 tengan la última palabra.
