Si hay algo que debemos tener presente siempre presente cuando realicemos un viaje, es nuestra seguridad. Cuando me refiero a este término, es importante asumirlo con mucha amplitud, ya que durante nuestras experiencias en destinos lejanos o incluso dentro de nuestro entorno habitual, puede devenir en un recuerdo no muy agradable de nuestro viaje o travesía.
Si bien, nuestro país posee unas características inusuales en términos de seguridad, recuerde que los amigos de lo ajeno, esperan siempre atentos a nuestros descuidos para aprovecharse de nuestras pertenencias. Por básicos conocimientos adquiridos en el amplio mundo de la seguridad personal y la prevención, el hampa tiene una ventaja natural sobre sus víctimas y es que ellos están pendientes de sus víctimas, las estudian con mucho o poco tiempo, a diferencia del ciudadano común, quien cada día sale a calle a labrar su futuro de manera honesta y con trabajo digno.
Consultando distintas fuentes y a expertos en esta área, de alguna manera sinteticé una serie de elementos y actitudes que le ayudarán a salir del radar de prioridades de los delincuentes dentro y fuera de Venezuela.
1.- Trata siempre de evitar hacer público tu viaje con antelación, sobre todo con gente no cercana a tu entorno. Las redes sociales son ventanas abiertas a información de este tipo. Investiga sobre el destino, ten a mano teléfonos de emergencia y si es posible la ubicación de los mismos. Lleva copias de todos los documentos de viaje. Asimismo, deja copia de los mismos en tu correo electrónico. Establece un punto de encuentro ante cualquier eventualidad, una vez en el destino.
2.- Cuando realices paseos a pie, siempre toma puntos de referencia de cómo llegar al hotel o sitio donde estés pernoctando. Mantén avistado cada vez que puedas o recuerdes, a tu grupo familiar, de amigos o viajes. Pon mayo atención en los más pequeños ¡No los pierdas de tu radar! Si utilizas algún medio de transporte, pidan recomendaciones a su agente de viajes o donde se hospeden. Es importante utilizar empresas debidamente identificadas. Evita abordar las más económicas, en ocasiones suelen ser de dudosa procedencia. Evita tener que afirmar que “lo barato sale caro”.
- Si llegas a un parque, restaurante o cualquier comercio, identifica y comunique a tu grupo las salidas de emergencia. Si acuden a un restaurante evita sentarte cerca de la entrada principal o la caja registradora. Trata en lo posible elegir un lugar que le permita tener una visual amplia de tu entorno. Si visitas un parque temático, dedicar unos minutos a establecer un punto de encuentro con horarios a fin de tener control regular sobre el grupo familiar les hará ganar tiempo de disfrute con calidad. Recomiendo necesario, acordar una “palabra clave”. De esta forma alejará los engaños y situaciones de riesgo mayor. Recuérdeles a sus niños, la importancia de no hablar ni recibir, nada de extraños.
- El sentido común, es el sentido menos común, según algunos. Por tal motivo, si alguna persona o situación les parece extraña, es porque lo es. La prevención está estrechamente ligada a señales que no somos capaces de distinguir a primera vista. En el entendido que no todos los países tienen las mismas realidades, recuerde que en el mundo de hoy, el terrorismo es un problema público y global. Si no se siente seguro o confiado del sitio a visitar, retírese sin dudarlo. Año a año la industria turística invierte millones de dólares en planes de prevención y entrenamiento especializado para su personal.
- Correr y alejarse de algún sospechoso no representa ninguna pérdida de orgullo o de hombría si es el caso, recuerde que mientras más alejado esté de un sujeto con estas característica, menor será el riesgo de experimentar un mal rato ¡Sencillo! Si no está a su alcance, no podrá hacerle daño ni apoderarse de sus pertenencias. Acuda, sin dudarlo, a las autoridades competentes y denuncie cualquier situación extraña. En caso de no tener ningún agente policial o de seguridad, aproxímese rápidamente a un lugar concurrido y pida ayuda de inmediato. La oscuridad, la soledad y el silencio son aliados de los bandidos.
- En los lugares con un gran número de personas, trate de no utilizar su teléfono celular y esté pendiente de sus bolsos y carteras. Los habilidosos carteristas no tienen fronteras ni conocen idiomas. Para ellos las presas más atractivas son las más descuidadas. Si lo llevamos al reino salvaje los depredadores no buscan a la presa más activa y sana para atacarla. Bajo ese mismo principio, cree y mantenga una rutina de prevención y seguridad ajustada a su capacidad y a su familia.
Tenga presente estos consejos de prevención y aplíquelos en su vida cotidiana. De esta forma, serán parte de su rutina, hábitos y su vida. Los tendrá presente siempre que salga de viaje con su grupo familiar o con sus amigos, minimizando así, las oportunidades de riesgo. Por algo dicen que es mejor prevenir que lamentar.
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