Joaquín Sabina ha depositado este martes un legado en la Caja de las Letras del Instituto Cervantes que incluye objetos personales como uno de sus sombreros negros, manuscritos de sus canciones, o una colección de fotos con sus amigos. El artista ha aprovechado la ocasión para afirmar que no volverá a los escenarios mientras se mantengan las medidas sanitarias para evitar la transmisión de la Covid-19.