El veterano mariscal de campo Philip Rivers lideró la ofensiva ganadora de los Chargers de Los Angeles que se impusieron a domicilio por 6-28 a los Cowboys de Dallas en el segundo partido de la jornada especial del Día de Acción de Gracias de la Semana 12 de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL).
Rivers tiró para 434 yardas y tres touchdowns en su primer partido de Día de Acción de Gracias en 14 temporadas de carrera, y además le ganó el duelo individual al joven pasador Dak Prescott.
Los Chargers (5-6) fueron siempre superiores a los deslucidos Cowboys (5-6), que sufrieron la tercera derrota consecutiva y se alejan de los playoffs.
El esquinero Desmond King devolvió una interceptación 90 yardas para el touchdown que sirvió como punto de inflexión a favor de los Chargers, que se acercaron a juego y medio de los líderes de la División Oeste de la Conferencia Americana (AFC), los Chiefs de Kansas City.
Los Chargers, que comenzaron la temporada con marca perdedora de 0-4 han comenzado a jugar su mejor fútbol y se han aprovechado del bajón sufrido por los Chiefs (6-4), que la iniciaron con racha de 5-0 y ahora tienen dos derrotas consecutivas.
Los campeones defensores de la NFC Este, Cowboys (5-6), perdieron su tercer partido consecutivo por al menos 20 puntos, todos sin el corredor estelar Ezekiel Elliott, en un tropiezo que afecta seriamente sus esperanzas de playoffs.
Dallas, que jugó en su partido número de Día de Acción de Gracias, finalmente acabó con una sequía de touchdown de 10 periodos, una nueva marca para el equipo, cuando el corredor atrasado Rod Smith anotó en acarreo de 2 yardas al inicio del cuarto episodio.
El receptor abierto Keenan Allen impuso marca personal con 172 yardas en 11 atrapadas con un touchdown, dándole 23 recepciones para 331 yardas y tres anotaciones en los últimos dos juegos, que lo dejaron como el jugador más destacado en la ofensiva de los Chargers.
Rivers completó 27 de 33 lanzamientos sin que le hiciesen ninguna interceptación ni fue derribado, dejando en 149,1 el índice de pasador.
Mientras que Prescott completó 20 de 27 pases para 179 yardas, sin ningún envío de anotación, le interceptaron dos balones, lo derribaron otras dos veces en 11 oportunidades y bajó a 60,6 el índice de pasador.
Al concluir el partido Prescott reconoció que tenía que haber hecho mejor labor individual de cara a que el equipo tuviese la oportunidad de luchar por el triunfo, algo que nunca sucedió.