Un verdadero espectáculo de glamour: así fue la llegada de Rachel McAdams al estreno de Doctor Strange en Los Angeles. La actriz, que protagoniza la cinta, resumió toda la temporada que se viene en un precioso vestido de Atelier Versace, con el que marcó tendencia y despertó el asombro de los invitados a la premiere.
Hombros al descubierto, un amplia abertura lateral y la cintura ceñida con un corte que imitaba un enorme lazo, la estrella estaba guapísima. Junto a ella, otros grandes de la gran pantalla con los que comparte cartel, también mostraron su buen gusto. Entre ellos, Tilda Swinton volvió a destacar por su estilo vanguardista. Lo hizo con un impresionante vestido verde de Haider Ackermann.
El efecto tornasolado de la tela le daba un cariz mágico a la actriz, una de las más irónicas de nuestros tiempos cuando se trata de moda. Robert Downey Jr. tampoco se quedó atrás. No cualquiera se atrevería con el estampado militar de la chaqueta de su traje Givenchy. Mucho más clásico que él, Benedic Cumberbatch demostró por qué está considerado entre los hombres mejor vestidos de la industria.
De negro riguroso, iba perfectamente combinado con su esposa, quien pronto comenzará a explorar otros cortes, ya que, según contó Benedict, está embarazada del segundo bebé de la pareja.
