México creció un 2,1% en 2017, según datos preliminares publicados hoy, y aunque la cifra es inferior a la registrada el año anterior, da “estímulo” a la economía, dijo el Ministerio de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
“El balance de la parte económica es bueno, el año pasado comenzamos con expectativas de crecimiento mucho más bajas, comenzamos con un 1.5%”, dijo el jefe del ministerio, José Antonio González Anaya, a los medios al final de un evento. En la ciudad de México.
El hecho de que la cifra de crecimiento -2.1% en las cifras originales en comparación con el año anterior, y del 2.3% en cifras ajustadas estacionalmente- es “sólidamente superior al 2% nos alienta”, dijo.
Sin embargo, los datos implican una desaceleración de la economía en comparación con 2016, cuando el producto interno bruto (PIB) registró, en términos reales, un aumento del 2,9%, cifra que se ajustó al alza después del 2,3% reportado anteriormente.
En la última revisión de su pronóstico de crecimiento en noviembre, el Gobierno estimó el aumento del PIB en un rango de entre 2 y 2.6% este año, a pesar del complicado contexto internacional y la incertidumbre generada por la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). )
Los datos preliminares presentados hoy por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) hacen referencia al hecho de que el crecimiento del PIB fue impulsado por los avances en los sectores terciario (3,1%) y primario (2,8%), mientras que la educación secundaria experimentó una disminución del 0.6%, en comparación con el año anterior.
Durante el cuarto trimestre del año pasado, el PBI aumentó 1.8% con respecto al mismo periodo de 2016, lo que significa una aceleración del crecimiento económico con respecto al período julio-septiembre de 2017, cuando el PBI registró un incremento de 1.5% En términos reales.
El resultado en el crecimiento del país no es “sorprendente” para la analista económica del banco Ver más Mariana Paola Ramirez, quien señaló que había ciertos “elementos de riesgo” para este año que no estaban presentes en 2016.
Este es el caso de la alta inflación con la que cerró el año, de 6.77%, que fue el nivel más alto desde 2000. Esto “implica salarios reales negativos, afecta el poder adquisitivo en las familias y reduce uno de los sectores más importantes que afecta a la economía crecimiento “, que es el sector de servicios.
Dichos salarios -argumentó- “no los habíamos visto en otros años”, así como las tasas de interés que, comparativamente, son más altas que en períodos anteriores, que es el resultado de bienes duraderos.
Ramírez adelantó que en las próximas semanas, cuando haya una medición del PIB en la que se incluyan las inversiones, “seguramente veremos una disminución” en este aspecto, debido a la “incertidumbre” que ha atravesado el país debido, entre otros aspectos. , la renegociación del TLCAN con los Estados Unidos y Canadá.
El analista dijo que la comparación entre 2016 y 2017 es complicada, dado que el primero fue un año bisiesto.
Sin factores estacionales, el PBI avanzó 1.7% en el cuarto trimestre en comparación con el mismo periodo de 2016, como resultado de los aumentos en el sector primario (4%) y el sector terciario (2.6%), y la disminución del 0.7% de la secundaria
En este sentido, Ramírez destacó el avance del sector agropecuario, que ha sido “importante” y ha contribuido al crecimiento económico del país.
El sector se ha beneficiado de una “mayor demanda global que podría ser buena, al menos para este año”, así como del aumento en los precios de los productos básicos (materias primas), he añadido. (efe)
