Hay cosas que el dinero no puede comprar. Es una frase cliché que he recordado probando un flamante Mercedes-AMG GLS63 del 2021. Hay tanto que ver dentro de este auto, tanta tecnología amontonada en esta colosal máquina de $153,950 dólares, que el no encontrar un interruptor para la calefacción del volante me comenzó a provocar desasosiego en mi primer día de prueba. Frustrado en mi búsqueda, apelé desesperanzado a ordenarle directamente al auto por un comando de voz que prendiera la calefacción para calentar mis dedos. Cual no sería mi sorpresa cuando me contestó en perfecto inglés sin gota de acento alemán: “This automovile do not have heated steering wheel”.
“No busques más que no tengo calefacción en el volante” parece haberme respondido. ¡Toma ya! No sé qué me ha asombrado más, si la habilidad del reconocimiento de voz para responder esta y otras preguntas que seguí haciendo solo por divertirme, o que, en un auto de esta categoría que incluso trae calentamiento y enfriamiento en el portavasos, me dejara con mis manos gélidas en medio del invierno.
De cualquier forma, no estaba dispuesto a que nada ni nadie se interpusiera entre el SUV de lujo de tres filas de asientos más potente del mercado y yo.
Desde afuera y por dentro
Pocos utilitarios tienen el atractivo visual que ostenta este Mercedes. Más que atraer, impone. Impone por su tamaño, y si lo divisas desde el espejo retrovisor de otro auto, las dimensiones “sobre alimentadas” de la parrilla ahora más tridimensional y el enorme logo de Mercedes en el GLS63 no pasaran desapercibidos. Ruedas más grandes de hasta 23 pulgadas y una ligera inclinación en la línea de techo le dan al GLS63 un aspecto tan deportivo como el que puede tolerar un vehículo de estas dimensiones, que no olvidemos, tiene como principal misión la de transportar a la familia.
El interior está dominado por dos excelentes pantallas de 12.3 pulgadas, que, fusionadas por un mismo panel de cristal simulan solo una gran pantalla. Una muestra los indicadores de conducción y la otra destinada al sistema de información y entretenimiento.
Aparte la innegable estampa tecnológica que trataremos en párrafos posteriores, el interior del 2021 Mercedes-AMG GLS63 sorprende por el lujo. Menos no se podría esperar de un auto en este precio, pero indisputablemente, este interior parece haber sido extraído del buque insignia de la Mercedes, el S-Class.
La atención típicamente esmerada en los detalles y la excelente calidad de construcción por la que Mercedes es notoria se muestra aquí con esplendor. Los hermosos asientos de cuero son cómodos y cuentan con calefacción de serie en las dos primeras filas, y en la tercera fila es opcional. Los asientos delanteros también cuentan con ventilación y masaje de serie. En el invierno podrá también disfrutar de calefacción en los paneles centrales de las puertas, los reposa brazos y la consola central, y podrá mantener las bebidas calientes o frescas en el portavasos. Luego de este derroche de “mimos”, sigo sin entender por qué el volante lo dejaron sin calefacción. Aunque no está cubierto de cuero, la Alcántara también se siete algo fría al tacto.
La tercera fila de asientos no llega a ser claustrofobia como en otros SUV de tres filas, pero tampoco creo que adultos de más de cinco pies disfrutarían allí de viajes largos. El acceso es fácil con el plegado eléctrico de los asientos, que, con la presión de un solo botón, la segunda fila se moverá automáticamente a la posición óptima para permitir el acceso.
Como si todo el lujo y la opulencia tecnología no fueran suficientes, Mercedes dota al AMG GLS63 con iluminación ambiental de 64 colores y un sistema opcional de difusión de fragancia en la cabina, por si su hijo de quince años decide propagar en forma de gas, parte de los residuos de metano de la pizza de pepperoni que ingirió el día anterior gozando video juegos con sus amigos.
Equipamiento y seguridad
La lista de sistemas avanzados de asistencia al conductor presente en el 2021 Mercedes-AMG GLS63 es sencillamente abrumadora. Solo dejan de forma opcional el control de crucero adaptativo, el control de carril activo y una función que mueve al GLS a un carril abierto con solo tocar la señal de giro. Además, el GLS 2021 viene con comunicación de automóvil a automóvil o “car-to-X communication”, lo que significa que está listo para hablar con otros autos en el futuro, una tecnología no lo suficientemente extendida en la actualidad.
La pantalla de control de instrumentos tras el volante puede ser configurada de tantas formas que, a pesar de haber probado varias opciones, no creo haber llegado a completarlas todas. Tecnológicamente es muy avanzado, y no me extrañaría que algunos lo considerarían algo abrumador.
Hay varias formas de introducir comandos en cualquiera de las dos pantallas. La dedicada al sistema de info-entreteniminto es táctil, mientras que hay una almohadilla estilo computadora portable y dos sensores táctiles en el volanta por los que también puede “jugar” con las configuraciones y opciones de los sistemas. Por si no fuera suficiente, el 2021 GLS63 ahora integra la interfaz “MBUX” que le permite operar una gran cantidad de funciones del vehículo por comandos de voz. Simplemente diga “Hola, Mercedes” para activar el sistema conectado a la nube, muy parecido a lo que ya conoce en materia de asistentes de voz como Alexa de Amazon. El sistema es sensible, tanto que con solo escuchar “Mercedes” se activa. Divertido y algo enojoso para los que, como yo, tenemos algún familiar llamado Mercedes.
Por suerte, Apple CarPlay y Android Auto están presentes, así como un hotspot de 4G.
En la carretera
Pesando casi tres toneladas, podría pensarse que este SUV de tres filas es un “mogollón” en la carretera. Le cuento sobre la nueva versión AMG del GLS como la que probamos. El AMG GLS63 del 2021 cuenta con 603 caballos de fuerza en su tren de potencia de V-8 híbrido “suave” de 48 voltios, suficiente “pegada” como para juntar su espalda al asiento en aceleración fuerte. Como el espacio para este articulo se reduce cada vez más, espero este dato le convenza: el nuevo GLS63 necesita solo 3.6 segundos para alcanzar las 60 millas o 96 kilómetros. “Caso cerrado” como diría la Doctora Polo.
Si impresionante es la aceleración del GLS, no podemos decir lo mismo de su dinámica de conducción. La marcha es firme, especialmente con los neumáticos opcionales de 23 pulgadas, pero esa firmeza no se traduce en una sensación de precisión en las curvas. La carrocería del GLS se balancea más de lo esperado, aunque todavía ofrece agarre suficiente como para divertirse en una carretera sinuosa.
Como otros aspectos de este auto, hay tantas formas de configurarlo a la hora de conducir que francamente puede que se sienta algo agobiado. Independientemente de los modos de conducción principales, Confort, Sport, Sport Plus e Individual, el AMG GLS agrega Trail para condiciones de barro o resbalosas y Sand por si quiere darse un paseo cerca del mar, como seguro ha visto hacer a algún disparatado ruso en YouTube. También puede poner el auto en modo de cambio manual y ajustar la nota del escape.
Por si no le he convencido de la complejidad de operar este Mercedes, le comento sobre el sistema opcional “E-Active Body Control”, que aprovecha el motor de 48 voltios para accionar los resortes en cada rueda de forma independiente. Al escanear el camino por delante, el sistema ajusta la suspensión en previsión de los baches en la carretera.
La economía de combustible como imaginará no es la mejor. El GLS450 más pequeño logra 21 millas por galón en manejo combinado, que serían 11.2 litros cada 100 kilómetros. El GLS63 de 603 caballos rinde 16 millas o 14.7 litros cada 100km también en manejo combinado. Si ha leído todo lo que aquí he expuesto sobre este SUV, seguramente pensará como yo: ¿Y qué importa?
Para escoger
Con solo un nivel de equipamiento en el GLS63 2021, los compradores simplemente tendrán que seleccionar qué opciones les gustaría en su SUV, que en los $ 132,00 ya está bien equipado (y de que otra forma podría ser preguntarán algunos). Las llantas de 23 pulgadas, el motor con cubierta de carbono, el sistema de sonido envolvente 3D Burmester o el paquete Warmth and Comfort elevaran el precio de este Mercedes. Nuestro GLS63 de prueba estaba dos cafés Skinny Peppermint Mocha por debajo de los $ 154,000 dólares.
Para la mayoría de los compradores los más pequeños y económicos GLS450 por $ 76,00 o el GLS580 en los $ 98,850 serán suficientes. En le otro extremo los que necesiten más opulencia que la del GLS63, pueden optar por un Mercedes-Maybach GLS600 con precio introductorio de $ 160,500
En esta altitud solo rondan pesos pesados, como el BMW X7, Cadillac Escalade, Land Rover Range Rover, Lincoln Navigator o el legendario Lexus LX 570.
Concluyendo
El Mercedes-AMG GLS63 es como aquellos equipos de música tan populares hace unos años; los tres en uno. Es un auto familiar que a la vez derrocha julo y pude llegar a ser deportivo. También admitamos que es un auto exclusivo por su precio, como también hay que admitir que, si existe, es por que hay muchos que pueden darse el lujo de desembolsar por el más de lo que algunas casas cuestan. Aquí digo como mi abuelita: “Al que Dios se lo dé, San Pedro se lo bendiga”.
** Roger Rivero es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA, la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana para fines de la reseña. De ninguna manera los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.