El presidente Luis Abinader Corona, los partidos políticos y diferentes sectores de la sociedad civil, están hablando de una casi segura modificación a la constitución dominicana, igual se trabaja para una reforma fiscal.
Entiendo que la propuesta de modificar la constitución del país, es una excelente oportunidad para que los dominicanos que vivimos en el exterior, trabajemos unidos para presentar propuestas que beneficien las actividades políticas, sociales y económicas que realizamos.
Esta es una oportunidad para que por primera vez, los dominicanos del exterior analicemos la relación que a diferentes niveles mantenemos con nuestro país de origen y sobre todo, como mantener y mejorar esa relación.
Se trata de integrarnos más al país, se trata de que se nos dé una mayor participación en todos los ámbitos. Y eso solo se logra, si trabajamos para hacer una comunidad dominicana en el exterior más fuerte, unificada y dispuesta al diálogo.
Los dirigentes de las organizaciones debemos encontrarnos y tratar temas como: 1. El impacto de las remesas enviadas a R.D, 2. Las inversiones de los dominicanos del exterior, 3. Aumento del número de diputados, la asignación de senadores en las circunscripciones, el voto por adelantado y dividir el territorio de las circunscripciones, tomando en cuenta el tamaño de éstas, 4- presencia de casas culturales en las ciudades o estados con población sobre 50.000 dominicanos, representación de los diferentes ministerios publicos en el exterior, entre otros y estar abierto a escuchar ideas y proyectos que deseen presentar los diferentes sectores representantes de la diáspora.
En este diálogo cabemos todos, especialmente los dirigentes de los partidos políticos, siempre que se entienda que buscamos el bienestar de la comunidad, no el beneficio particular de los que nos integremos a este diálogo. En definitiva lo importante es plantear nuestros objetivos como comunidad, en un intento de que se nos tome en cuenta, en la reforma constitucional y en la reforma económica.