En los últimos días, se ha desatado una controversia en la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) de Puerto Rico tras las declaraciones del comisionado del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Roberto Ivan Aponte, quien alertó en un programa de radio local sobre la presencia de más de 40,000 personas fallecidas que aún figuran en la lista de votantes activos en la isla. Este dato ha generado preocupación entre diversos sectores, pues se teme que esta situación pueda dar lugar a posibles fraudes electorales.
La Denuncia del Comisionado
Según el comisionado del PIP, esta alarmante cifra podría facilitar que personas inescrupulosas voten en nombre de fallecidos, aprovechando la falta de depuración del registro. “Estamos ante un escenario que podría comprometer la integridad del proceso electoral en Puerto Rico”, expresó el comisionado. Según él, la presencia de estas personas fallecidas en la lista de votantes no es un problema nuevo, pero la inacción por parte de las autoridades competentes ha exacerbado la situación.
Evidencia y Contexto
La preocupación del comisionado no es infundada. De acuerdo con informes recientes, la CEE ha enfrentado dificultades en la actualización de sus listas, en gran parte debido a la falta de recursos y a la burocracia que retrasa la eliminación de personas fallecidas del registro. Un informe de la Oficina del Contralor de Puerto Rico señaló en 2021 que la CEE no había actualizado de manera adecuada los registros de votantes desde el huracán María en 2017, lo que dejó a miles de fallecidos en la lista de votantes.
Además, un análisis realizado por el Centro de Periodismo Investigativo reveló que entre 2016 y 2020, solo se eliminaron cerca de 22,000 nombres de personas fallecidas del registro, una cifra que palidece en comparación con los aproximadamente 70,000 fallecimientos ocurridos durante ese periodo.
Las Implicaciones
El hecho de que miles de personas fallecidas sigan registradas como votantes activos en Puerto Rico abre la puerta a una serie de problemas que pueden socavar la confianza en el proceso electoral. Aunque no existen pruebas concretas de que votos de personas fallecidas hayan sido emitidos en elecciones recientes, el mero hecho de que esta posibilidad exista genera preocupación.
La Respuesta de la CEE
Ante estas denuncias, la CEE ha expresado su compromiso de trabajar para resolver el problema. Sin embargo, la institución ha señalado que la actualización de las listas de votantes es un proceso complejo que requiere coordinación con diversas agencias gubernamentales, incluyendo el Registro Demográfico y los municipios. A pesar de estos desafíos, la CEE ha asegurado que se están tomando medidas para mejorar la precisión del registro de votantes de cara a las próximas elecciones.
La presencia de más de 40,000 fallecidos en la lista de votantes en Puerto Rico es un tema de gran relevancia que pone en entredicho la integridad del sistema electoral de la isla. Es crucial que las autoridades tomen medidas inmediatas para corregir esta situación y garantizar que el proceso electoral se lleve a cabo de manera justa y transparente. La confianza del pueblo en sus instituciones democráticas depende de ello.