La gira de ensueño de Alejandro Fernández y Luis Miguel se ha convertido en una pesadilla para el Potrillo.
Fernández inició un proceso legal contra Luis Miguel por una gira que habían negociado y no se materializó, según informó la oficina del astro de la música regional mexicana.
De acuerdo con representantes de Fernández, los artistas comenzaron en octubre de 2015 las negociaciones de la gira, la cual iba a realizarse entre abril y noviembre de 2016. Firmaron acuerdos preliminares con el promotor en espera de crear un contrato formal, pero no lograron llegar a ese paso.
Las gestiones continuaron en 2016 para una posible gira en 2017 que tampoco se dio.
“Nos hemos visto en la necesidad de presentar un procedimiento legal en el que se hacen del conocimiento a la autoridad, una serie de hechos relacionados con las negociaciones iniciales de la citada gira”, señaló el martes la empresa Star Productions, representante de Fernández, en un comunicado. La empresa proporcionó otros detalles sobre el procedimiento citando razones legales y de confidencialidad.
“Hacemos de su conocimiento esta declaración para que ni medios de comunicación, empresarios, patrocinadores, ni el público en general, puedan ser engañados con una gira que al día de hoy no existe”, agregó.
El miércoles representantes de Warner Music, la discográfica a la que pertenece Luis Miguel, dijeron a The Associated Press que no tenían declaraciones al respecto del caso.
Fernández señaló que continuará con sus compromisos en solitario y con el lanzamiento de su próximo álbum, “Rompiendo fronteras”, previsto para febrero.
“Me hubiera gustado mucho complacer con este proyecto a todo mi público”, señaló Fernández en la misiva. “Siempre he tenido un gran compromiso con mi gente, pero las cosas no sucedieron como queríamos”.