El Senado de Estados Unidos está listo para emitir este sábado un veredicto sobre el cargo contra el expresidente Donald Trump por incitar a la insurrección antes del asalto al Capitolio del 6 de enero, y todo apunta a que será absuelto ante la falta de los votos republicanos necesarios, aunque este proceso bien podría haber acabado con sus expectativas para presentarse de nuevo a las elecciones a la Casa Blanca en 2024.
En una muestra de confianza, los abogados de Trump utilizaron el viernes solo alrededor de tres de las 16 horas asignadas para defender a su cliente argumentando que el juicio político era “absurdo” y equivalía a una “cultura de cancelación constitucional” destinada a silenciar tanto al expresidente como a sus millones de simpatizantes.
El juicio se reanuda en menos de tres horas, después de solo cinco días de desarrollo. El abogado de Trump, Bruce Castor, ha indicado que no tiene la intención de llamar a ningún testigo, como tampoco lo ha hecho la otra parte. Después de una votación de procedimiento, ambas partes tendrán la oportunidad de presentar argumentos finales.
El Senado podría deliberar a puerta cerrada a continuación, como paso previo a la votación, pública y definitiva, sobre la acusación.
El veredicto reflejará la polarización política de la nación que ha marcado el principio del proceso, cuando solo seis republicanos se unieron a los 48 demócratas del Senado y dos independientes para validar el carácter constitucional del juicio. Los republicanos restantes adoptaron la posición de que un presidente no puede ser juzgado por cargos de acusación después de dejar el cargo.
Así las cosas, los demócratas no esperan más de cinco o seis votos de los 17 que necesitan para condenar a Trump e inhabilitarle para cualquier cargo público al que decida presentarse.
Sin embargo, múltiples senadores republicanos consideran que el nuevo juicio político supone el punto y final de las aspiraciones de Trump para una posible segunda candidatura a la Casa Blanca en 2024, incluso si sale absuelto de este procedimiento.
Los senadores consultados por ‘The Hill’, entre ellos partidarios de absolver al presidente, consideran que las pruebas presentadas por los abogados del Partido Demócrata en su caso por insurrección contra el expresidente de Estados Unidos son suficientes como para impedir que Trump vuelva a presentarse y aventuran la puesta en marcha de un distanciamiento respecto del magnate a lo largo de los próximos tres años.
Si bien el Partido Republicano se ha mostrado casi invariablemente a favor de la absolución de Trump, los nuevos vídeos del asalto de los simpatizantes de Trump al Capitolio, el pasado 6 de enero, han causado consternación en algunos senadores. Los partidarios del presidente persiguieron activamente a algunos legisladores e insultaron a los agentes de seguridad con gritos de “cerdos” y “traidores”.
Todo ello después de que los demócratas reprodujeran las palabras del expresidente inmediatamente anteriores a la incursión, durante un discurso frente al Capitolio. “Si no lucháis como si no hubiera un mañana, os vais a quedar sin país”, espetó entonces el presidente. Uno de los senadores republicanos considera que las imágenes no hacen sino constatar “la clase de cretino que es Donald Trump”.
“En realidad, los demócratas nos están haciendo un favor”, apunta el senador. “Están demostrando que Trump no tiene las cualificaciones necesarias para volver a presentarse a la Casa Blanca”, añade, por no mencionar que estas imágenes impulsarán el mencionado distanciamiento respecto al expresidente en el seno del Partido Republicano, que ha actuado durante cuatro años a su completo servicio.